La renuncia de Mauricio Rojas al Ministerio de Cultura, a sólo 4 días de haber asumido el cargo, generó un rápido movimiento de piezas al interior de La Moneda para buscarle un sucesor. Y la elegida -pese a que eran otros los nombres que circulaban, como el de Francesca Florenzano- fue la arqueóloga de la Universidad del Norte, Consuelo Valdés Chadwick.
Prima lejana del ministro del Interior Andrés Chadwick (quien a su vez es primo del Presidente Sebastián Piñera), Valdés Chadwick tiene una larga trayectoria en el mundo de la cultura, las artes y la museología que data desde 1980, cuando asumió la dirección del Museo Regional de la Araucana.
Tras dos años en su cargo, la profesional fue la encargada de crear la Coordinación Nacional de Museos en la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos (DIBAM) y, posteriormente, ofició durante cinco años como gerente de proyectos culturales para la Fundación Andes, creando programas de apoyo a museos y programas de becas de creación e investigación artística.
En 1993 Consuelo Valdés Chadwick se sumó al directorio de la corporación Artequín y nueve años más tarde se integró al Consejo Nacional de Televisión, donde permaneció oficiando como consejera hasta 2010; año en que asumió la dirección ejecutiva del Museo Interactivo Mirador (MIM).
La arqueóloga asume el cargo en medio de la polémica que generó la permanencia del ahora ex ministro Rojas por sus dichos sobre el Museo de la Memoría; dichos que tensionaron la relación entre el ministerio de Cultura y el mundo de las artes, que se unió casi completo para manifestarse en su contra. Así, Valdés Chadwick tendría como primera misión reestablecer el vínculo y calmar las aguas.
