En la tradicional parroquia Nuestra Señora de la Divina Providencia se está realizando el velorio de la destacada actriz nacional Nelly Meruane, fallecida hoy en la madrugada a los 90 años. Su funeral se realizará mañana en el panteón del Sidarte en el Caementerio Gneral, luego de una misa a las 14 horas en la misma iglesia.
El actor argentino Juan Carlos Bistoto, con quien estuvo casado durante 49 años, recibió las muestras de pesar de diversas figuras del espectáculo que llegaron al templo. Recordó sus años de matrimonio con Nelly Meruane y dijo que su relación fue amor a primera vista.
“Yo pierdo a una maravillosa mujer, mi esposa por 49 años, es muy triste, pero partió muy serena, a las 3 de la mañana me dijo ‘me voy, me voy’ y agradeció a la que la cuidaba con mucha ternura, era muy dulce”, recordó el ahora viudo, visiblemente emocionado.
Nelly Lucinda Consuelo Meruane Solano nació Toltén, Región de la Araucanía, el 20 de diciembre de 1927. Destacó en cine, radio, teatro y televisión, y durante 20 años perteneció al elenco estable del Teatro de la Universidad Católica de Chile.
Desde muy pequeña, Nelly Meruane mostró un fuerte interés por las artes escénicas; sin embargo, la drástica oposición paterna la hizo buscar otro camino, estudiar pedagogía en castellano, pero sus impulsos fueron mayores, estudiando teatro y pedagogía de forma paralela.
Al comenzar sus estudios en el Instituto Pedagógico de la Universidad de Chile, ingresó al Centro de Arte Dramático del mismo (Cadip), formando elenco de varias obras. Posteriormente, ingresó a la carrera de teatro en la Universidad Católica.
Debutó en 1952 en la obra El tiempo y los Conwayde J.B. Priestley en el Teatro Municipal de Santiago, siendo alumna del primer año de la Academia de Teatro.
En 1960 estrenó La pérgola de las flores, de la escritora Isidora Aguirre, donde reemplazó a la actriz Ana González en el papel de Rosaura. En los siguientes años, popularizó el papel de «La Cotocó» en la serie Juani en Sociedad que protagonizó junto a la actriz Silvia Piñeiro.
Posteriormente, viajó a Venezuela junto con su marido, logrando una reconocida carrera en teatro y televisión. En 1977 actuó en la película El pez que fuma, dirigida por el dramaturgo Román Chalbaud.
Volvió a Chile en 1981; ese mismo año interpretó a «Dora» en la exitosa teleserie La madrastra de Arturo Moya Grau. En 1982 protagonizó una de las obras más importantes del teatro chileno Mama Rosa, de Fernando Debesa, consagrándola como actriz en una de sus mejores interpretaciones.
