Hace tres años, en 2015, Dave Grohl protagonizó uno de los momentos más recordados en la historia de los chascarros de la música, cuando durante una actuación junto a Foo Fighters en el Ullevi Stadium de Gotemburgo de Suecia, se cayó del escenario y, lejos de querer abandonar eñl show, tomó el micrófono y le pidió a sus fanáticos que lo esperaran, que él iba a atender su pierna y volvía. Cumplió, ya que terminó el concierto sentado e inmovilizado.
Resulta que el pasado Este 5 de junio, Foo Fighters regresó a Gotemburgo para presentar su último disco, ‘Concrete and Gold‘, donde el artista les tenía preparada una broma a los asistentes. Recién había salido al escenario y se fue hacia un costado, provocando la inquietud y preocupación de sus seguidores. Sin embargo, segundos después saldría a escena el verdadero Grohl.
Así fue el momento desde el escenario y desde el público.