Un equipo de arqueólogos en Italia han descubierto una inscripción que, según dicen, puede mostrar que los libros de historia han estado equivocados durante siglos.
Los historiadores han creído durante mucho tiempo que el Vesubio entró en erupción el 24 de agosto de 79 D.C, destruyendo la ciudad Pompeya, que pertenecía al entonces Imperio Romano.
Esta fecha, sin embargo, genera dudas ya que entre las ruinas se han encontrado frutos otoñales y braseros de calefacción, que podrían ser evidencias de que el desastre ocurrió después de agosto.
Ahora, una inscripción de carbón hallada recientemente se suma a la evidencia de que la erupción quizás no ocurrió en agosto.
Relatos de la tragedia
Hasta ahora, los historiadores han determinado la fecha de la erupción en base en escritos antiguos que contienen testimonios de primera mano.