Tras 37 años en el poder, Robert Mugabe fue removido de la presidencia de Zimbabue con un golpe de Estado rápido y sin una sola gota de sangre.
Más de una semana después de que los militares lanzaran una advertencia al entonces mandatario, ya hay un nuevo gobierno en gestación.
Ahora, el ex partido político de Mugabe, Zanu-PF, y el ejército intentan convencer a la opinión pública de que este episodio no tiene nada de extraordinario.
Pero aún quedan muchas incógnitas sobre cómo cayó este líder africano que, a sus 93 años, llevaba casi cuatro décadas intercalando el puesto de presidente con el de primer ministro.
¿El golpe buscaba proteger al jefe de las fuerzas armadas?
Los militares intervinieron el gobierno después de que Mugabe destituyera al vicepresidente, Emmerson Mnangagwa.
Algo que, para muchos, dejaba el camino abierto a la esposa del mandatario, Grace, como su sucesora.
Pero es posible que haya habido otra motivación detrás del golpe militar.