¿Por qué alguien donaría sus óvulos para ayudar a un extraño a tener un hijo? Elaine Chong le explica sus razones a la BBC.
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La primera vez que escuché sobre donación de óvulos fue mientras estudiaba en la universidad en Estados Unidos. Estudiamos sociología, psicología y biología de la donación de esperma y de óvulos, y me inspiró mucho la naturaleza de entrega que conlleva hacerlo. Supe que era para mí.
El profesor nos dijo que los bancos de óvulos buscaban a mujeres jóvenes y sanas que tuviesen educación superior, pero que había una fuerte escasez de donantes que no fueran blancas.
Pensé en gente como yo, de ascendencia china, que puede tener problemas de fertilidad y desea mucho tener hijos. Pensé también en mis amigos gays que hablaban sobre lo mucho que querían ser buenos padres y cómo mi regalo podría ayudarlos.
El profesor hablaba sobre cómo un óvulo podía tener un valor de hasta US$3.000, lo que hizo que todo el aula de clases exclamara: "¡Ooooh!".
Decidí probarlo y me registré en una página web adornada con fotos de bebés felices y regordetes.