Para muchos fue sorpresivo que el director del Servicio Nacional de Prevención y Respuesta ante Desastres, Senapred, Álvaro Hormazábal, fuera sacado de su cargo cuando llevaba apenas un año a cargo de ese organismo.
El exmilitar dejó el puesto el lunes 18 de marzo, lo que fue anunciado dos días antes a través de un comunicado público de la Subsecretaría del Interior. Quedó como directora subrogante Alicia Cebrián, quien era subdirectora de Reducción del Riesgo de Desastres.
“Esta decisión se enmarca en la necesidad de darle un nuevo impulso al organismo en el marco de las distintas emergencias que ha debido enfrentar el país”, señaló en su parte central el escrito.
Álvaro Hormazábal, quien llegó a ser cabeza del Senapred por medio de un concurso de Alta Dirección Pública y antes fue director regional de la Onemi en Tarapacá durante seis años, había recibido cuestionamientos en 2023 cuando en una zona de Licantén no se activaron las alertas SAE durante las inundaciones.
Y ahora también estaba en el tapete tras los incendios de febrero pasado en la Región de Valparaíso.
“No puede haber una institución del Estado culpando a las municipalidades del problema”, dijo el Presidente Gabriel Boric luego de que Álvaro Hormazábal criticara a los municipios oficialistas de Viña del Mar, que encabeza Macarena Ripamonti, y de Quilpué, que lidera Valeria Melipillán, por su accionar en la tragedia.
REEMPLAZO DE LA ONEMI
El Senapred es el organismo técnico del Estado para abordar los desastres, y fue establecido por la Ley 21.364, promulgada el 27 de julio de 2021 tras una década de tramitación en el Congreso.
Reemplazó a la Onemi y además se le asignaron nuevas funciones, pero la ley también estableció que otros organismos e instituciones, como las municipalidades, también deben asumir responsabilidades sobre el tema.
Y ese es el punto que Álvaro Hormazábal tocó antes de su salida y que reiteró luego de ser removido del Senapred, cuando se lanzó de nuevo con todo en contra de las alcaldesas de Viña del Mar y de Quilpué.
“Gente que trabaja con tan nivel de dejación y abandono no puede ser reelecta (en relación a ambas ediles)… Con lo que uno puede ver, que no hay un argumento técnico, todo indica que salí en un año de elecciones municipales por lo que dije de esas comunas… Me voy muy tranquilo, pues me he preocupado de hacer presente el mal trabajo que han hecho estas alcaldesas”, dijo Álvaro Hormazábal la semana pasada en CNN Chile.
Y los funcionarios del Senapred coincidieron con su exdirector, lo que manifestaron en un comunicado.
“Lamentamos profundamente la decisión adoptada por el Presidente, quien injustamente hace responsable a nuestro servicio de los problemas generados por los municipios afectados por la catástrofe… Tal resolución es carácter político y no técnico. No busca necesariamente mejorar estos problemas, sino que más bien contribuye a potenciar la imagen de gobiernos locales que no han estado a la altura de la catástrofe”.
LOS PROBLEMAS DEL SERVICIO
Para este año, el presupuesto destinado a emergencias aumentó un 28%. Pero muchas voces resaltan que los casi 24 mil millones de pesos destinados de forma específica al Senapred son escasos.
Además, se recalca que el servicio sufre por la falta de personal, y es puesto como ejemplo el hecho de que cada Dirección Regional funciona con 18 funcionarios. De ellos la mitad son operadores de radios, a los que hay que sumar los administrativos, por lo que en terreno con suerte hay seis o siete personas.
El arquitecto Víctor Orellana es consultor y experto en gestión de desastres. Y hace años ocupó el cargo de subdirector de la Onemi, por lo que tiene muy claro el panorama de su sucesora, el Senapred.
“El diseño del Senapred fue discutido durante diez años en el Congreso y posee una buena estructura. El problema es que le falta mayor financiamiento para cumplir con todas las funciones que se le exigen, por eso los parlamentarios no pueden mirar para el lado”, señala el especialista, quien está de acuerdo con los dichos de Álvaro Hormazábal.
“Su salida fue injusta, inoportuna y apresurada. Nada se soluciona con esa decisión, al contrario, se le pone más carga a un servicio que venía desgastado. Esto se dio en un mal momento, porque ahora se requería de rapidez para funcionar y ahora con una jefatura subrogante es claro que todo irá lento”.
“Sé que Álvaro Hormazábal pidió más dinero y que no fue considerada su solicitud. Y lo que dijo sobre las responsabilidades de las municipalidades es cierto. No es un capricho, porque eso está en la ley. No puede ser que los municipios no hagan lo que ahora por ley deben hacer, y que antes era casi un favor. El Senapred no puede hacer todo, las responsabilidades están más repartidas ahora”, añade Víctor Orellana.
Según el exsubdirector de la Onemi, “en el Senapred hay muchos concursos para atraer a profesionales y directivos, y con la salida del director todo se paraliza. El concurso que ganó Álvaro Hormazábal se extendió en un proceso de casi seis meses, así es que hay que pensar en un periodo similar para tener un nuevo director. Y mientras tanto seguirán las catástrofes… Conozco a Alicia Cebrián, alguien de mucha experiencia, pero su área no es la directiva. Ella deberá hacer lo que pueda con lo que va quedando”.
Víctor Orellana dice que “hay que terminar de instalar lo que está diseñado en la ley y cubrir los cargos directivos que están en subrogancia, pero con lo que le pasó al último director a lo mejor baja el interés por concursar, pues se ve que aunque se tenga conocimiento técnico y se llegue por Alta Dirección, hay que tener también capacidades políticas”.
VOZ PARLAMENTARIA
La diputada del PdG Karen Medina, integra la Comisión de Emergencia, Desastres y Bomberos. Y desde esa posición analiza lo que sucede con el Sanepred.
“Sin ánimo de defender al servicio, que tiene falencias, el problema en las crisis de emergencia ha sido la suma de otros factores, como los municipios. El exdirector, Álvaro Hormazábal, tiene toda la razón cuando dice que hay comunas que hoy aparecen como víctimas, cuando han tenido la responsabilidad número uno de organizarse y hacer frente a las emergencias.
- ¿Cuál es la labor de los municipios en las emergencias?
- Son los primeros que deben tener claridad sobre el tema desde sus planes reguladores y sus planes de emergencia, porque son los que conocen el territorio y saben cómo están organizadas las poblaciones. Esa información no la tiene el Senapred. Acá se está tratando de tapar las negligencias municipales en los últimos incendios sacando al director, por lo que no comparto esa decisión. Hay que solucionar el grave problema local de preparación de los municipios.
- ¿Cree que todo pasa por falta de recursos para el servicio?
- Descarto eso, y no estoy dispuesta para sumarle dinero. Independiente de la posibilidad de que lleguen a faltar funcionarios, ellos deben trabajar coordinados con los servicios regionales, con las delegaciones presidenciales y con los municipios. El problema es un tema de organización, que está mal definido desde la base. Senapred debe ser apoyado. Se le puede seguir metiendo plata y funcionarios, pero si el resto de los servicios no están en la misma línea, seguiremos con los mismos problemas.