Versace y Armani son marcas tan famosas en la moda que su imperio fashion se estableció en el inconsciente colectivo con esa vieja dualidad que también impera entre los “dioses” del fútbol respecto a Pelé y Maradona. Ambos íconos de la alta costura inventaron el concepto de la alfombra roja, hoy usado indiscriminadamente, y aquel modelo del desfile-espectáculo que sigue prevaleciendo en las pasarelas europeas.
Tras la muerte de Gianni Versace, asesinado a balazos hace casi 25 años en Miami Beach, la compañía familiar quedó en manos de la hermana menor, Donatella, quien entonces manejaba el marketing y que hoy se enorgullece de la forma en que aferró el mando en medio de la crisis y el drama.
“No elegí esta vida ni esta carrera. Me sentía muy dichosa siendo la caja de resonancia de las ideas de Gianni, y de estar al frente de los platós en nuestras campañas. Me llevó mucho tiempo encontrar mi voz”, confiesa. La madre de ambos era una humilde modista cuando la historia comenzó y ella apela a talesfragancias del Atelier Versace para evocar esa infancia sin lujos: “Me recuerdan a Calabria, mi ciudad natal, a la que estoy muy unida”, contó a Magazine Style.
Donatella y su amigo Prince
A los 67 años, la empresaria reconoce que “me enfrenté de verdad a mis miedos cuando empecé a trabajar en la Tribute Collection, el desfile por el 20º aniversario de la muerte de Gianni. Durante aquellos meses, el volver al archivo y tener aquellos vestidos en mis manos después de 20 años fue insoportable. Pero hoy siento que ya no vivo a la sombra de mi hermano... Ahora somos uno, y lo que se ve en la pasarela es inconfundiblemente Versace y a la vez absolutamente yo misma, con mi propia visión de la marca”, enfatiza.
Donatella y Gianni entablaron amistad con la reina Isabel y diversas celebrities mundiales, pero todavía privilegia su “admiración por Prince, quien era un genio”. Y en la cima de una marca que factura fortunas dignas de Forbes, la reina fashion concluye que “el mayor logro es el hecho de que Versace siga siendo relevante y querido. Me enorgullece que hayamos conseguido que forme parte de un imaginario cultural que va más allá de la moda”. De modelo top a “Mamma” del vestuario, al fin el imperio Versace le reservaba un inesperado protagonismo en su glamour planetario…
