El presidente del directorio de la Clínica Las Condes, Alejandro Gil, se querelló contra la enfermera Carla Garrido, quien en julio de este año lo denunció por administrarse la tercera dosis de vacuna contra el covid-19, cuando la medida aún no estaba autorizada en el país.
Gil presentó una querella criminal contra quienes resulten responsables de infligir la Ley de Derechos y Deberes del Paciente al divulgar sus datos personales. La acción se enmarca en el juicio oral por despido injustificado contra la exjefa del vacunatorio de la CLC, quien denunció al presidente de la clínica.
El presidente del directorio de la CLC realizó la querella, ya que “al parecer dos enfermeras técnico en enfermería superior accedieron a la información privada contenida en la ficha clínica del paciente y la difundieron a terceros”.
El juicio oral contra Alejandro Gil quedó fijado para las 11:30 horas del 13 de abril de 2022. Si bien la demandante pedía una indemnización de más de $150.000.000, el Juzgado de Letras del Trabajo de Santiago desestimó la solicitud y propuso que se le remunere un mes por cada año de servicio, además del mes de aviso previo y otros cuatro salarios más.
Cabe recordar que en ese entonces, la denunciante y otra enfermera señalaron que el empresario las obligó a inocularlo con una tercera dosis de Pfizer, pese a que ya contaba con su esquema completo de Sinovac.
Producto de la situación, la jefa de Servicios Ambulatorios, Leticia Ortiz, renunció tras 15 años de trabajo en la clínica, mientras que Garrido fue desvinculada del recinto asistencial.