En conversación con CNN, la ministra de Transportes, Gloria Hutt, insistió en que no existió ningún tipo de maniobra para incidir en que personas no pudiesen llegar a votar. Esto, dado que se ha denunciado en distintos medios que habría escasez de buses del transporte público.
“Una cosa que de verdad uno debería descartar es que haya alguna intencionalidad de afectar el funcionamiento del sistema o la concurrencia de personas descartadas. Eso está totalmente fuera de la planificación del sistema”, sostuvo la titular de Transportes.
En la mismo línea, la secretaria de Estado reconoció que “pudimos tener demoras y haber sido lentos en la reacción”, pero recalcó: “De ninguna manera vamos a estar haciendo maniobras para que las personas no puedan ir a votar”.
De todas maneras, esta tarde ya se presentó una querella en su contra por eventuales delitos.
