La comediante Paty Cofré estuvo presente en la edición especial de “Podemos Hablar” del jueves, la cual contó con la presencia de Julio César Rodríguez en la animación, en vez de Jean Philippe Cretton, quien se encontraba fuera del país.
Ella sobre su estado de ánimo señaló que estaba preocupada, esto debido al marcapasos que hace poco lo comenzó a utilizar. La comediante contó que no quería tener que recurrir a eso, por lo que se resistió por un año a esta intervención.
“Yo lloré como una guagua cuando me avisan que tenía que ir a urgencias. Tenía que hacerlo porque el corazón ya no quería más”, confesó.
“Yo no tenía presión al pecho, no tenía ahogo, nada. Estaba correctamente normal”, señaló. Esto fue diagnosticado durante un control de rutina, en el cual le tomaron las palpitaciones y el pulso. El doctor le pasó el estetoscopio y se le cambió la cara.
“Feliz de estar aquí con usted”
“Él le escribió un papel a mi hijo, ‘llévesela inmediatamente a Urgencias porque su mamá le da un infarto ahora’”, contó Paty, pero ella no le parecía esto. “No hijo, yo me voy para la casa. Me voy para la casa porque no dejé nada preparado en mi casa. Mañana a primera hora, yo vengo”, le contestó.
Su hijo no le hizo caso, y la llevó a urgencias. “No tenía pulsación, tenía menos de 32 cada segundo”, señaló. “Llegó la cardióloga y me dice: ‘señora Paty, no sea porfiada porque a lo mejor todo este rato usted lo va a pasar, pero usted se duerme y no la vamos a tener, no va a despertar”, contó.
El animador le preguntó si es que ella siente apego por su vida, y ella le dijo que no. “Poquito, no mucho, son muchos años ya, pero feliz de estar aquí con usted, feliz de mi lindo público”, señaló.
Paty Cofré aseguró que no le tiene miedo a la muerte: “es un descanso, un descanso bonito. Yo no he sido una mujer tirando codazos, que pasa por encima de las personas, bien quitadita de bulla. Pero me gusta hacer humor, me gusta estar aquí con usted y contenta porque Dios me dio un poquito más de tiempo al parecer”.