Fue por varios días el comentario obligado entre los participantes de “El discípulo del chef”, el más que evidente acercamiento amoroso entre Miel Blanca y Max Cabezón, quienes este miércoles dieron cuenta de su incipiente romance en el programa de CHV con un celebrado beso en pantalla.
Un registro que ambos protagonistas aprovecharon para relajarse y dar rienda suelta en sus redes sociales a un amor que por varias semanas habían mantenido en secreto. Como el que subió Miel en su Instagram escuchando el tema de Bad Bunny “Bye, me fui”, justo en la parte de la canción donde el artista afirma “o que el amor a media’ se ha vuelto moderno, eh (...) Y si e’ real yo no lo oculto, eh (...) Si ere’ mi diosa, te hago un culto”.
El gesto de Max Cabezón
Eso, hasta que Gala Caldirola dio las primeras alertas esta semana del interés amoroso en un comentado diálogo con el exMasterchef.
En aquella oportunidad, Max ya había dado luces de su interés por Miel Blanca: “A mí me gusta Miel. Pero me gusta su cocina, me gusta que sea ganadora. Me gusta que sea Otaku y que tenga el pelo rosado”.
Algo que también había sido refrendado por la ganadora de la primera edición “El discípulo del chef” en una serie de mensajes realizados en las publicaciones de Max en redes sociales.
“Hay una chica que se llama Miel, que todos los días, cada vez que sale tu nombre, se le pone una sonrisa, así, como de oreja a oreja, y dice: ‘No, si es mi amigo’”, reveló este lunes Gala, una celestina que tan sólo dos días después vio concretado su esfuerzo por unir a la pareja.
Y anoche, una vez que todo los televidentes del programa supieron del romance, salieron las primeras publicaciones oficiales del amorío.
Como la que realizó Cabezón en su Instagram, donde reposteó una historia de Miel Blanca en la red social, en la que aparecía comiendo unos Naan hechos por el cocinero para ella, para asegurarle que no sólo la regaloneará con comida.
“Cuando el @max_cabezon hace sus Naan”, que el chef respondió con un tierno “sus Naan y sus Nanai”.