Los bailarines que pertenecieron a “Rojo” de TVN, Leticia Zamorano y Hernán Arcil, se unirán este lunes a “Aquí se baila”.
Ambos salieron del mismo programa de talentos, aunque separados por 15 años. Leticia Zamorano, integrante de la generación 2003 de “Rojo”, y Hernán Arcil, ganador de la generación 2018 del mismo, debutarán como pareja de baile esta noche.
“Fue bien intenso y sorpresivo todo. Me llamaron un domingo en la tarde, dije que sí, y al día siguiente ya estábamos instalados acá ensayando”, cuenta Leticia sobre el ofrecimiento, que consistió desde el inicio en tenerla de dupla con Hernán, con quien se conocen desde hace años.
“Leticia me dirigió en un musical hace años, pero nunca antes bailamos juntos. Cuando me propusieron bailar con ella yo sin dudarlo dije que sí porque admiro mucho a Leti, siempre he sabido que es una excelente compañera”, agrega Hernán.
Para ambos es su primera vez compitiendo en un programa televisivo de baile desde su salida de “Rojo”. Leticia se mantuvo por cinco años en el programa, lo que le sirvió de puntapié inicial para continuar haciendo danza en la TV.
“Ahí aprendí mucho de escenarios, me conocí mucho como artista y aprendí mucho de la parte creativa, además que yo estaba estudiando en ese entonces. Cuando terminé el programa dije: ‘Ya, nunca más compito’. Por eso, al día siguiente de aceptar ‘Aquí se baila’ desperté y dije ‘¡Voy a competir de nuevo! ¡¿Qué hice?!”, ríe.
Luego de pasar otros cinco años más como coreógrafa en distintos programas de TVN, bailó con distintos artistas en la Teletón y se formó afuera un año en Suecia. Después dirigió un musical llamado “Corazón Rojo”, junto con algunas de sus excompañeras del programa, y hace dos años fue una de las coreógrafas del estelar “Bailando por un sueño”. “Siempre me he dedicado mucho a la parte creativa, como coreógrafa. Saqué un proyecto de danza llamado FAMS sobre empoderamiento femenino a través del movimiento. Y este último tiempo he estado mucho en el área de pedagogía, trabajo en un proyecto del Mineduc que integra las disciplinas artísticas en el currículum de los colegios”, cuenta, agregando que lo que la motiva es el acceso a la danza y al arte.
“Lo que me gusta de este programa es que está totalmente enfocado, hay hartos bailarines, hartos montajes, y la calidad va hacia la danza y los buenos espectáculos. Sirve para que la gente se vaya nutriendo con buenos shows. Yo siento que en Chile falta mucho darle la calidad que se necesita a los artistas chilenos en vez de mirar para afuera, por eso escogí volver y no quedarme en Suecia cuando tuve la oportunidad”, señala.
Hernán, en tanto, empezó a los 13 años en el Teatro Municipal de Santiago, tras lo cual se fue a trabajar a cruceros y a diferentes compañías a nivel mundial, para luego ingresar al programa, ganarlo y quedarse por una temporada más. Hasta que vino la pandemia y todo cambió. “Cuando se cerró todo en general por la pandemia fue muy abrupto, me pilló desprevenido. En ese momento la danza no me estaba dando mucho, así que decidí comenzar de nuevo, hice un cambio de switch total y me di la oportunidad de hacer otras cosas, fortaleciendo mis lazos personales y preguntándome a mí como Hernán qué quiero hacer realmente”, explica.