Tomás Barrios (212º en el ranking) está teniendo el mejor arranque de año de su carrera. Debido a una lesión en la rodilla derecha, por la cual tuvo que ser operado en agosto, estuvo seis meses fuera de las canchas, pero volvió en este 2023 con las luces encendidas.
Tras avanzar una ronda en la qualy del Abierto de Australia, llegó a la definición del Challenger de Piracicaba, en Brasil. Y luego de ser clave en el dobles chileno para regresar al Grupo Mundial de la Copa Davis, por estos días cumple su actuación más destacada en un torneo ATP.
Dos victorias consecutivas ante tenistas ubicados en el Top 100, el colombiano Daniel Galán (83º) y el español Bernabé Zapata Miralles (76º), lo tienen instalado en los cuartos de final de Córdoba. Hoy tendrá un desafío mayor en busca de las semifinales, ya que enfrentará al local Sebastián Báez (47º), cuarto sembrado.
Más allá de lo que pase en esta jornada, esta performance en el certamen transandino es la confirmación de que “Tomi” está de vuelta y que quiere que ésta sea su temporada de despegue. Así lo advierte su entrenador, Guillermo Gómez.
¿A qué se debe este gran inicio de año?
—Principalmente, a su preparación. Fue un acierto haber esperado los seis meses del ranking protegido, para que pudiera entrenar y ponerse a punto. Tomás viene de muy joven con algún déficit por su lesión en la espalda y eso se ha ido recuperando, pero como la exigencia del calendario no permite entrenar mucho en el año, se ha ido avanzando de a poco. Ha trabajado mejor y hemos tenido el tiempo para prepararlo bien.
¿Costó mantenerlo enfocado en esos seis meses que estuvo de baja?
—Fue gran parte de su cambio mental. Él ha ido evolucionando y creyó en un proceso de entrenamiento que iba a ser para su mejoría física y táctica. Eso lo mantuvo conectado con lo que había que hacer, así que muy bien con lo que él entrenó todos estos meses después de la operación, que no fue fácil.
¿Puede ser éste el año del despegue de Tomás?
—Por lo que está demostrando ahora, debiera ser. Se ha ido preparando mejor, todos los años ha ido evolucionando cada vez más. Recordemos que antes de la lesión estaba 124 del mundo. Por ende, ha habido siempre un ascenso, lo que pasa es que ha sido lento y tortuoso, por la cantidad de lesiones, pero yo creo que este año es muy factible terminar entre los 100.
¿El triunfo en la Copa Davis fue un punch anímico?
—Siempre. Ganar una serie de Copa Davis es un empujón importante para todos.