Ben Nicholson, un abogado inglés de 42 años, tomaba desayuno con su esposa y sus dos hijos mientras disfrutaba de unas vacaciones familiares en Colombo, la capital de Sri Lanka.
Allí se encontraba, en el lujoso hotel Shangri-La, cuando dos atacantes suicidas ingresaron al recinto y lo hicieron explotar, en el marco de la ola de atentados contra recintos de este tipo e iglesias que acontecieron en el mencionado país, dejando hasta el momento un saldo de 290 víctimas fatales.
Tras la explosión, el hombre no supo más de su familia. Por lo mismo, recorrió durante horas las calles de Colombo cubierto por la sangre, buscando encontrar a su esposa Anita Nicholson (42) y sus hijos Alex (11) y Annabel, según consigna Daily Mail.
Al respecto, el funcionario del Hospital Nacional de Colombo Pushpa Zoysa, señaló que observó al abogado mientras trataba de dar con sus parientes. «Lo vi cubierto de sangre así, caminando arriba y abajo justo allí», indicó al medio.
«Me habló dos veces, preguntando por su familia. Tenía sangre por todas partes, pero no estaba herido, aparte de un pequeño corte en la oreja», indicó.
De igual manera, afirmó que Nicholson «estaba caminando completamente solo y siento lástima por él, pero había tantas personas muertas y moribundas aquí, que no tenía tiempo para hablar más con él».
El abogado del hombre, Shakya Wickramanayake, confirmó que su cliente encontró a su hijo «en un depósito de cadáveres a media tarde (del domingo)». Antes de esto, halló a su hija y su esposa.
Cabe mencionar que el hombre llevaba una semana de vacaciones en Colombo con su familia.
