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Una de la tarde y 15 minutos. De acuerdo con el programa, la hora en que Movimiento Original debe iniciar su presentación en el VTR Stage, y en que Ases Falsos debe finalizar la suya en el escenario Itaú de Lollapalooza.
Pero no. Producto de un primer desfase, a esa hora esta última banda inicia la interpretación de «Simetría», mientras la agrupación urbana arranca con su show a 150 metros de distancia.
La solución encontrada por la organización fue efectiva, pero nada de elegante: Dejar sin volumen a los liderados por Cristóbal Briceño, quienes de todos modos siguieron adelante con esa romántica pieza, coreada con fuerza por los cerca de 700 asistentes que los veían al pie del cañón.
Fue la primera postal que desde los escenarios regaló este año el festival, porque la otra había sido registrada minutos antes del inicio, con miles de personas esperando su turno para ingresar al Parque O’Higgins pasado el mediodía.
Los accesos, como era de esperar, no dieron abasto en un inicio para toda esa demanda, provocando que los asistentes más precavidos gastaran una buena cantidad de tiempo en aglomeraciones, dinámica que el intenso calor que a esta hora se siente sobre Santiago seguramente transformó en un verdadero castigo.
Ese arribo anticipado quizás sea la primera señal de cumplimiento en el objetivo que el festival se puso para este año: Atraer a público joven, efectivamente mayoritario en la largada entre quienes escucharon la presentación de Ases Falsos y entre quienes se paseaban por el Parque.
Ante ellos, la banda chilena interpretó temas de los dos discos que han editado a la fecha, partiendo con «Salto alto», «Conducción», «La gran curva» y «Manantial». La respuesta de la audiencia fue siempre entusiasta, ratificando los escalones que la agrupación ha subido no sólo en su desarrollo, sino también en el reclutamiento de fanáticos.
Lo que hay que saber
Para los que aún estén aguardando la actuación de su artista favorito para arribar al Parque, les recordamos que los accesos para público son por calle Tupper y Av. Matta. Hasta allí se puede llegar en bicicleta (hay lugares para aparcarlas) o en locomoción colectiva, medios que se recomiendan antes que los automóviles. Como incentivo para usar el Metro, por ejemplo, hay disponibles 60 mil tarjetas Bip conmemorativas, además de un lugar de recarga dentro del Parque, por primera vez en los seis años de Lollapalooza.
El mismo Metro, además, ha aumentado su frecuencia de trenes desde el mediodía, mientras que en las estaciones Parque O’Higgins, Rondizzoni y Toesca, las boleterías atenderán hasta las 00:30 horas. El Transantiago, en tanto, reforzará en las horas de llegada y en las de salida los recorridos 201, 302, 506, 507 y 509.
Como siempre en este tipo de eventos, está prohibido el ingreso de elementos que puedan ser usados como armas, además de cámaras profesionales y alimentos, exceptuando una botella de agua individual cerrada y de plástico, y hasta 250 gramos de fruta picada en una bolsa hermética.
Todo lo demás no estará permitido, salvo la alimentación de menores hasta 4 años y la de personas que necesiten comida especial debido a alguna condición médica, presentando un documento que así lo acredite.
Dentro de los elementos más puntuales, el cada vez más resistido bastón para selfies también está entre los prohibidos, mientras que sí se permite el ingreso de mantas, toallas, sombrillas de mano, protector solar, coches, cantimploras, mamaderas plásticas y largavistas.
Como siempre, el consejo es asistir con ropa cómoda y protegerse del sol, además de sintonizar con el espíritu verde que tiene este evento. Esto porque la meta para este año es superar el 50 por ciento de reciclaje alcanzado el año pasado, y llegar a un 80 por ciento.
Y quienes se quedaron con las ganas de asistir al evento, un consuelo es el que ofrece el operador de televisión por cable VTR, que transmitirá el evento en los canales 101 y 102, y en HD a través de las señales 701 y 702. Para los que no son clientes de esa compañía, la opción será www.vtreslolla.cl.
Por Sebastián Cerda / PUB
