“Lo que tengo que decir es que reafirmo mi más amplio respeto a todas las personas. El cambio registral es sólo parcial, no soluciona el problema de fondo de las personas. Y lo que hay que buscar es que estas personas sean reconocidas en lo que más son, más que simplemente una función de tipo de registros. Gracias”, sostuvo para retirarse sin contestar más preguntas.
«Reconozco que, a lo mejor, utilicé mal el ejemplo en ese contexto. Pero el nominalismo es llamar con un nombre a algo que no es. Y creo que la dignidad más grande que necesitan todas las personas, también estas personas (los transgéneros), es que se les respete y se les llame con su nombre más fundamental, y ese es el de persona humana», añadió el cardenal.
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