- Director de economiaparatodos.cl
El Canal del Fútbol, más conocido como CDF, para muchos ha sido el gran negocio de los últimos 15 años.
Creada en 2003, la señal transmite los partidos que se desarrollan en el marco de las competiciones organizadas por la Anfp: la Primera División, Primera B, Segunda División y la Copa Chile. Para ello el canal dispone de tres señales: básica, premium y HD; estas dos últimas sólo accesibles para quienes pagan mensualmente una suscripción.
Actualmente son más de 880 mil las personas que pagan mes a mes para tener acceso a los contenidos exclusivos de la señal, generando cuantiosos ingresos para sus dueños: la Anfp y Jorge Claro Mímica.
Y es que en 2003, el ex dirigente del fútbol convenció a Reinaldo Sánchez, presidente de la Anfp por aquel entonces, de la pertinencia de crear un canal que ostentara el monopolio de los derechos de transmisión del balompié nacional. Para ello, el empresario debió invertir 18 millones de dólares por el 20% de propiedad de este nuevo canal. Una participación que aún conserva.
Cada cinco años la Anfp podía ejercer una opción de compra por el 20% de Claro Mímica.
En 2010, Harold Mayne-Nicholls quiso hacerlo, sin éxito. En 2015 Sergio Jadue también. Inicialmente la nueva oportunidad para los clubes debía ser en 2020, pero Claro Mímica se abrió a enajenar su participación en 2016 a cambio de 198 millones de dólares, cifra que gustó en Quilín.
No obstante, en términos formales todo indica que no se hizo la oferta, lo que abrió espacio para que Jorge Claro aumentara el precio a 260 millones de dólares. Una suma que alejó a las partes y que truncó la propiedad total a la que aspira la Anfp.
Los planes en Quilín son simples: adquirir el 20% de Claro Mímica y posteriormente concesionar la señal por 12 años.
Sin embargo, el nuevo precio de la participación ha dificultado la operación. Lo que barajan los dirigentes es pedir un crédito para lograr un acuerdo con el empresario o, bien, esperar que una empresa deseosa de la concesión financie la compra del 20% transable.
Una trama con desenlace aún no escrito por el canal de televisión chileno de mayor valor en la industria.
Las opiniones expresadas aquí no son responsabilidad de Publimetro