En febrero de 2020, Katie Peters asistió a un supermercado cuando sintió un pinchazo en una nalga. Atrás había un hombre que la ayuda a tratar de ver si había algún insecto que justificara el dolor.
Al momento del ataque, el sujeto le dijo a su víctima: «Lo sé, se siente como una picadura de abeja, ¿no?».
Cuando llegó a la casa se dio cuenta que tenía una herida y efectuó la denuncia. Después de ver el video de seguridad, la policía detuvo a Thomas Bryon Stemen.
En el registro se apreciaba cómo el hombre de 51 años clavaba una jeringa a la mujer. Al ser detenido, la policía encontró más jeringas en poder de Stemen y todas llenas de su semen.
El relato
La mujer describió a la CBS Baltimore que «empecé a conducir a casa y me empezó a doler mucho».
Después agregó que “llamé a mi hijo y le dije: ‘Algo no está bien, espero que no pase nada. Espero llegar a casa, te amo”.
Ahora la justicia encontró culpable a Stemen y lo condenó a 10 años de cárcel por el brutal ataque.
También se informó que el sujeto tenía antecedentes de violencia intrafamiliar y había sido condenado por ese delito en 1999.