Diversas reacciones dejó la once que compartió Gabriel Boric (CS), abanderado del Frente Amplio a las primarias de izquierda, junto a la candidata del PS, Paula Narváez, el pasado 2 de julio en Concepción.
Gestionada en Twitter por la hija del diputado PS Juan Manuel Monsalve -que aseguró que fue completamente espontánea-, el encuentro marcó la primera reunión entre Boric y Narváez después del fracaso de las primarias amplias de la oposición.
Según informó La Tercera, Narváez fue interpelada por los partidos que la apoyan, el PPD y Nuevo Trato, quienes advirtieron una «señal confusa».
Al respecto, la abanderada PS aseguró -según recoge el citado medio- que la once «se ha sobreinterpretado. Él está en una primaria distinta a la que nosotros estamos buscando e impulsando en el centro y de la izquierda (…) Sin embargo, creo que es fundamental conversar con todos los actores”.
Además, la ex ministra de Michelle Bachelet aseguró que la invitación también estaba extendida para el abanderado PC, Daniel Jadue, quien será contrincante de Boric en las primarias de Apruebo Dignidad.
“Lo puedo invitar a tomarnos un tecito y un cafecito. Con mucho gusto lo haría, con Daniel, pues creo que en el centro y la izquierda tenemos que buscar acuerdos, puentes en común, unidad y diálogo para poner a Chile en el centro de nuestras preocupaciones”, agregó.
De esta forma, Narváez insistió en que “creo que son necesarias muchísimas conversaciones y estoy disponible para compartir un tecito, una empanada o una sopaipilla con cualquiera de los actores del centro y de la izquierda que estamos por impulsar transformaciones y cambios reales”.
“Dejo abierta la invitación a Daniel para que nos tomemos un tecito cuando él quiera o un cafecito para compartir sus preocupaciones”, complementó.
Cabe señalar que Jadue catalogó la once como una «señal de Concertación» y afirmó que “mientras ellos hacen onces donde se encuentran de manera súper espontánea, nosotros estamos en la calle buscando ligarnos con ese mundo popular que todavía no se convence que la revuelta tiene que terminar en la urna”.