Los dichos del ministro de Salud, Enrique Paris, siguen generando coletazos. Este lunes, la Confusam respondió en duros términos a la abierta crítica que hizo el secretario de estado al personal del Hospital Ramón Barros Luco, de Santiago, quienes habían iniciado una protesta, bloqueando 27 camas del recinto hospitalario.
Desde la organización gremial pidieron el alejamiento inmediato del ministro, señalando que su manejo de la pandemia ha sido errático y que no se han liberado suficientes recursos para estrategias clave, como la de testeo, trazabilidad y aislamiento.
«El Pase de movilidad, malls abiertos, Fantasilandia funcionando, dan cuenta de una estrategia completamente equivocada. Para hacer un buen sistema de testeo, trazabilidad y aislamiento, se requieren muchos recursos que el Gobierno se ha negado sistemáticamente a entregar en cantidad suficiente», sostuvo el vicepresidente de la Confusam, Esteban Maturana.
«Frente a esta problemática, hemos sostenido que no da para más la permanencia de Paris en el Ministerio de Salud de nuestro país. No podemos menos que rechazar enérgicamente las absurdas, intolerables, indecentes e infelices declaraciones de Paris que el pasado sábado declaró elogiosamente hacia el personal de Castro, lo cual nosotros compartimos porque están haciendo patria sanitaria, pero ponerse a compararlos con Santiago es un absurdo», manifestó.
«En cualquier país civilizado del mundo, un ministro que recae en esta estupidez, debería ser cesado en su cargo inmediatamente. Desgraciadamente ese no es el caso de Chile y parece que vamos a tener que aguantar a Paris hasta que termine este Gobierno. Por alguna razón, y a pesar de todos sus errores, Piñera encontró un ministro como a él le gusta, obsecuente, sumiso y sometido y por eso no lo saca».
Asimismo, el líder de la asociación de funcionarios comentó que una vez que finalice la pandemia, incluso, se aventuran a seguir por la vía judicial, procesos contra Paris y autoridades de Gobierno, cimentados en la gran cantidad de muertos producto de la pandemia.
«Todos los muertos se los vamos a cobrar y vamos a seguir persiguiendo todas las acciones judiciales, porque 40 mil personas muertas no son gratis. Podrán decirnos que en muchos países pasó esto, pero hay lugares que han hecho las cosas bien y que no están lamentando esta cantidad de muertos. Pongo un ejemplo: Nueva Zelanda, donde una mujer joven ha gobernado ese país en pandemia y ha logrado controlar la pandemia porque ha puesto la vida antes que los negocios», sostuvo emulando el paradigmático ejemplo oceánico que también ha entregado en varias oportunidades el Colegio Médico.