En prisión preventiva quedó el sujeto de 33 años formalizado por el presunto parricidio frustrado de su hija de dos meses en la comuna de La Cruz. Esto determinó Roberto Lizana, juez de Garantía de La Calera. El magistrado aplicó la medida este viernes 11 considerando la pena del delito y el peligro de fuga del detenido.
Sin embargo, la prisión preventiva no fue lo único que surgió de la audiencia donde el sujeto conoció sus cargos. El fiscal Hugo Arismendi realizó también un detallado relato de los hechos. La agresión a la guagua de dos meses fue en un condominio en la comuna de La Cruz, que está aledaña a La Calera.
Según dijo el fiscal Arismendi, el 10 de junio, a las 9.50 horas de la mañana, el detenido y su conviviente empezaron a discutir y a forcejear. Entonces este hombre, “a efecto de propiciar la muerte de su hija de dos meses, la toma del lugar en que encontraba durmiendo y la arroja violentamente contra el suelo”.
Luego de estos hechos, el sujeto escapó de la casa y luego se entregó a Carabineros.
En el video de la audiencia que se conoció hoy, mientras el fiscal Arismendi relataba estos hechos, el detenido movía la cabeza en señal de negación. Pese a ello, el fiscal dijo que el tipo no podía desconocer que “la agresión violenta podía ocasionar la muerte. Su hija resultó con traumatismos”.
Antes de la prisión preventiva
Sin embargo, durante la audiencia donde se decretó la prisión preventiva, el juez le dio la palabra al sujeto para entregar su versión. Es la siguiente.
“El miércoles, día anterior a lo sucedido, estábamos todos en la casa. Estaba mi pareja, su padre, algunos amigos. Estábamos en un asado. En ese momento llamó la madre de ella y dijo que el papá tenía cáncer terminal y le quedaban seis meses de vida”, dijo al principio.
Luego dijo que “entramos a la casa, nos acostamos. Yo le digo a ella que tenía una reunión importante y le pregunté si la podía acompañar a Viña del Mar. Le podía pasar la camioneta para que ella se quedara con su mamá. Ella me dijo ‘pero cómo se te ocurre hueón, bla, bla, bla. Nos acostamos”.
La tragedia misma
Respecto al hecho que causó la tragedia contó: “Me levanté temprano. A las 8.30 de la mañana. Ahí le dije a ella ‘¿vas a ir a trabajar o vas a ir a Viña altiro?’. ‘¿¡Cómo voy a trabajar, hueón!? ¿¡Cómo se te ocurre, hueón!?’. Me dijo mil estupideces, mil cosas, que me hirieron bastante”.
Entonces se desató la tragedia. “La mina se puso muy loca. Demasiado loca. Me empujó y yo la empujé. Y la niña estaba en la cama y no me di cuenta. Al caerse ella en la cama, la guagua salta al suelo, al piso. Yo desesperado la recogí y la mina, desconsolada, dijo ‘voy a llamar a los Carabineros’”.
Luego pasó lo siguiente: “Yo le dije que no llamara. Dejé la guagua en la cama y la seguí hasta la cocina para que no llamara a Carabineros, para que arregláramos ahí el asunto. Y ella va y justo estaba el rallador de las papas y me lo tira a la cara. Saca un cuchillo y yo salgo arrancando. ¿Qué pasa si me quedo ahí? Hubieran pasado cosas peores. Me fui y llamé a mi abogado”.