Tras la realización de una nueva manifestación en el sector céntrico de Santiago, Carabineros de Chile realizó un balance positivo de la implementación de la estrategia de copamiento de la zona con personal de Control del Orden Público.
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Por segunda semana consecutiva, los efectivos policiales se situaron en gran número a la altura de Plaza Baquedano, de acuerdo a una estrategia que evitó que los manifestantes llegaran hasta los nuevos cierres metálicos levantados en torno al monumento al general Baquedano.
Respecto a la evaluación de la táctica policial, el jefe de zona Metropolitana de Carabineros, general inspector Marcelo Araya, destacó tanto la rapidez para frenar los desórdenes producidos en la movilización, como también el trabajo ágil para restablecer el tránsito en la Alameda y otros lugares del centro.
Sin el monumento de Baquedano
«Conforme a la planificación, Carabineros rápidamente actuó e intervino con la responsabilidad de restablecer y restaurar el orden público, lo que afecta a cientos que personas que pretenden desplazarse tranquilamente por la principal arteria de la ciudad», manifestó Araya, junto con dar el balance final de detenidos, que fueron 48 en esta jornada.
«Hasta este momento hay una cantidad de 48 detenidos, uno de ellos por lanzamiento de elementos incendiarios, bombas molotov. Se han producido daños menores a la infraestructura pública y afortunadamente no han habido carabineros lesionados hasta el momento», agregó, añadiendo además que «se actuó rápidamente, copando los espacios y restableciendo y restaurando el orden público quebrantado, de forma rápida y certera».
