Un grupo de más de 150 antiguos altos cargos de Seguridad Nacional de Estados Unidos alertaron hoy del riesgo que supone el retraso en la transición de poder en el país norteamericano y la tardanza por parte de Donald Trumpen reconocer a Joe Biden como ganador de las presidenciales.
En una carta enviada a la Administración General de Servicios, los exaltos cargos han instado a la agencia del Gobierno a nombrar oficialmente a Joe Biden y Kamala Harris presidente y vicepresidenta electa de Estados Unidos, tal y como proyectan los principales medios de comunicación.
Según ha informado el diario ‘Politico’, la misiva señala que así ambos podrán «acceder a información necesaria para abordar asuntos de seguridad nacional, como la rueda de prensa diaria del presidente y las decisiones que quedan pendientes sobre el uso de la fuerza militar».
La misiva ha sido enviada a medida que Trump sigue rechazando la idea de admitir su derrota en los comicios a pesar de que no cuenta con los votos electorales para hacerse con la victoria. Se trata de la primera transición de poder que se ve obstaculizada en dos décadas.
Entre los firmantes de la carta se encuentran el exsecretario de Defensa Chuck Hagel, el antiguo director de la CIA Michael Hayden, el general retirado Wesley Clark, el antiguo subdirector de la NSA Chris Inglis y la exembajadora de Estados Unidos en la ONU Samantha Power, entre otros.
Figuras políticas que han formado parte de la Administración Trump se han unido también, como el antiguo embajador estadounidense en Irak Doug Siliman y varios exaltos cargos de Contraterrorismo.
Según la ley, la administradora de la agencia, Emiliy Murphy –que fue nombrada por Trump– debe reconocer formalmente a Biden como presidente electo antes de que el equipo de transición pueda hacerse cargo de las diferentes agencias del Gobierno, lo que incluye el sistema de Seguridad Nacional.
El propio Biden ha explicado esta semana que no ha comenzado a recibir todavía el dosier diario en el que se informa al presidente de las cuestiones más importantes del día, como las principales amenazas a las que se enfrenta el país.
Si bien el candidato demócrata ha dicho sentirse tranquilo y ha tratado de mantener la calma ante las acusaciones de fraude del actual presidente, diversos medios de comunicación estiman que aunque Biden recibiese el dosier la diferencia sería mínima dado que aún no puede tomar decisiones en calidad de jefe de Estado.
El ejemplo de Bush Al Gore
En el año 2000 sucedió algo parecido: El entonces presidente saliente, Bill Clinton, decidió dejar que George W. Bush leyera el dosier mientras finalizaba el recuento de los votos. Sin embargo, el director de la Administración General de Servicios en aquel momento, David Barram, rechazó declarar a Bush presidente electo hasta que el Supremo resolvió los recursos pendientes a su favor.
A pesar del gesto de Clinton, la Comisión sobre los atentados del 11 de septiembre desveló que el retraso en la transición de poder, que fue de 36 días en aquella ocasión, «redujo a la mitad el periodo normal de transición y llevó a un retraso de seis meses en la puesta al día de los equipos de Bush en materia de Seguridad Nacional».
En este sentido, dicha comisión destacó la importancia de que estos periodos sean «lo más cortos posibles» para evitar que repercutan en la seguridad del país y sus ciudadanos.