Un 64% de las mujeres ha sido víctima de algún tipo de acoso sexual, según cifras entregadas por el Observatorio Contra el Acoso en Chile en julio.
Y tal cómo han reconocido diversos organismos internacionales -incluido ONU mujeres- las condiciones de encierro impuestas por la pandemia agudizan el problema.
Ante eso, la Universidad de Chile quiere actuar. «Chile se cansó de los abusos. ¿Y la Chile?». Ese es el llamado principal de la nueva campaña de la Dirección de Igualdad de Género (Digen) de la casa de estudio.
En línea con «la nueva normalidad», la campaña será totalmente online. Se estima un aumento del acoso vía redes sociales y de la práctica de publicar fotografías íntimas de la afectada.
En paralelo, avanzaron en crear un Protocolo de actuación ante situaciones de acoso sexual y discriminación arbitraria; constituir una “Red de Primera acogida” conformada por profesionales de todas las Facultades e Institutos; establecer una Oficina de Atención socio jurídica y una Unidad de Salud mental para personas afectadas por acoso. Y se creó la Unidad de Investigaciones especializada en la Dirección Jurídica.
Además, comunicaron desde la Digen, se han realizado cursos de formación general sobre Género y Violencias, e implementado planes de capacitación sobre acoso sexual y laboral. También existe un Observatorio de Violencias e Igualdad de Género de la Digen, el cual proveerá de información precisa y actualizada sobre el tema.
El acoso no da tregua
Lamentablemente, pese a esos escuerzos, no ha sido suficiente. Y así justamente lo planteó la Directora de Igualdad de Género, Carmen Andrade, quien sostuvo que han constatado «que, por una parte, existen aún altos niveles de desinformación sobre los contenidos de la Política y los caminos institucionales existentes para presentar denuncias, y por otra persiste la ‘naturalización’ de situaciones de violencia de género que ocurre en la Universidad».
Las denuncias han bajado, pero no porque la violencia haya cesado. «Es altamente probable que haya recrudecido en situación de confinamiento (han aumentado las llamadas para pedir orientación e información), sin embargo, han disminuido significativamente las denuncias», afirmó Andrade.