Tras el criticado gesto que tuvo Donald Trump contra la presidenta de la Cámara de Representantes del Congreso, Nancy Pelosi, -a quien dejó con su mano estirada para saludarlo- y al que ella respondió rompiendo en dos la copia del discurso que dio en el estado de la Unión, ha quedado al descubierto una vez más la profunda rivalidad ideológica entre ambos.
La mujer electa más poderosa de los Estados Unidos actualmente, tiene 79 años, es demócrata y es la primera en acceder a la presidencia de la Cámara de Representantes o Cámara Baja. También es la primera en ocupar el cargo dos veces.
Se encuentra en el segundo lugar de la sucesión presidencial, después de Trump y el vicepresidente. Ha sido la primera mujer en dirigir a los demócratas a la interna del Congreso y desde que retomó su cargo en enero del 2019 ha cuestionado duramente las medidas del gobierno actual.
Es opositora al proyecto impulsado por el gobierno para construir un muro en la frontera con México así como de la criminalización que viven los inmigrantes, de la guerra en Irak y trabaja activamente en el juicio político que enfrenta Donald Trump.
Nancy Pelosi dio el visto bueno a la entrega del acta que abrió el proceso de destitución contra Donald Trump, en el que se le acusa por abuso de poder, al exigirle a Ucrania que investigara al ex vicepresidente Joe Biden.
Entre el partido y la familia
Nancy nació bajo el alero de una familia demócrata. Su padre fue congresista por Maryland en algún momento y su madre se organizaba con otras mujeres del partido.
Más tarde, se mudó a San Francisco, donde formó su propia familia junto a Paul Pelosi. Sin embargo, pese a que se dedicó activamente a la crianza de sus cinco hijos, también trabajó en la política junto al partido demócrata.
Fue miembro del Comité Nacional y más tarde fue elegida presidenta local del Partido Demócrata en California. Su casa llegó a funcionar incluso como centro electoral del partido.
En el congreso por primera vez
Sus intereses no apuntaban a lo más alto del poder en Estados Unidos, sino hasta 1987 cuando Susan Burton, congresista por San Francisco, le pide en su lecho de muerte que tome el cargo en la Cámara de Representantes.
Tras la designación que abrió paso a Nancy Pelosi en el congreso, su carrera empezó a tomar curso. Durante su primer paso por la cámara baja trabajó en la aprobación de proyectos históricos, que van desde la Ley de Cuidado de Salud Asequible hasta la Ley Sanitaria de Obamacare.
También trabajó en proyectos importantes como la Ley de Protección al Consumidor, la Ley Dodd- Frank de Reforma de Wall Street que exige cuentas a la bolsa tras la recesión del 2008 y la Ley de Alivio Tributario que estimuló la economía del país en 2010 tras la crisis.