Ayer la realeza británica sufrió un terremoto. Los duques de Sussex comunicaron que renunciaban a la realeza, por lo que se serán independientes financieramente, además de repartir su vida entre Reino Unido y América del Norte.
El País de España, asegura que la reina Isabel está «furiosa» por la decisión que tomó su nieto Harry y su esposa, ya que la pareja no le contó a nadie la determinación que había tomado y de la que tuvieron noticia por la televisión.
“Después de muchos meses de reflexión y discusiones internas, hemos elegido hacer una transición este año para comenzar a forjar un nuevo papel progresivo dentro de esta institución. Tenemos la intención de dar un paso atrás como miembros «mayores» de la Familia Real y trabajar para ser financieramente independientes, sin dejar de apoyar plenamente a Su Majestad la Reina». Así comenzaba el comunicado dado a conocer ayer por parte de los duques.
De acuerdo al medio español, fuentes aseguran que la reina y su familia estaban «profundamente decepcionados». Mientras que otros medios indican que los miembros de la realeza estaban «conmocionados, tristes y totalmente furiosos» con la pareja.
«El nivel de engaño ha sido asombroso y todos, desde la cabeza de la casa real hasta la base, sienten que han sido apuñalados por la espalda», ha dicho una fuente de palacio al Daily Mail.