El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, atacó el martes a su homólogo francés, Emmanuel Macron, por sus críticas a la OTAN y cargó contra otros miembros de la alianza militar por ser demasiado lentos a la hora de aumentar su gasto en defensa.
Mientras primeros ministros y presidentes de la alianza de 29 naciones se congregaban en Londres para una cumbre por el 70 aniversario de la OTAN, Trump dijo a reporteros que las declaraciones de Macron fueron «muy desagradables» por lamentar «muerte cerebral» de la organización en parte por la falta de liderazgo de Washington.
«A veces dice cosas que no debería decir», afirmó Trump. «Creo que a veces hace cosas que son contraproducentes para su propio país».
Durante la última campaña electoral en Estados Unidos, Trump describió a la OTAN como «obsoleta», pero desde entonces suavizó sus críticas.
La relación entre Washington y París se tensó especialmente esta semana luego de que el Representante Comercial de Estados Unidos propuso imponer aranceles a importaciones francesas valoradas en 2.400 millones de dólares después de que Francia decretó un impuesto a gigantes tecnológicos globales como Google, Amazon y Facebook. Está previsto que los dos mandatarios se reúnan en un aparte de la cumbre.
Sobre la financiación militar, Trump apuntó que «muchos países no han pagado aún».
Cuando Rusia se anexionó la Península de Crimea en 2014, los países de la OTAN suspendieron los recortes en el gasto decretados al final de la Guerra Fría para incrementar la inversión. Se comprometieron a «avanzar hacia» un gasto del 2% de su PIB en su presupuesto nacional de Defensa para 2024.
«Se podría argumentar que han estado delinquiendo durante 25-30 años», manifestó Trump luego de reunirse con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg. La cifra del 2% «es un número muy bajo, en realidad debería ser el 4», añadió.
Stoltenberg, que tiene la complicada tarea de intentar mantener a la OTAN unida mientras sus líderes se atacan entre sí, dijo que «estamos haciendo más juntos, América del Norte y Europa, de lo que hemos hecho en muchas décadas».
Se prevé que para finales de este año, los aliados europeos y Canadá hayan incrementado su gasto en defensa en 130.000 millones de dólares desde 2016. La OTAN predice que la inversión alcanzará los 400.000 millones en 2024.
La cumbre de Londres se celebra en un clima de fuertes tensiones y enfrentamientos entre los líderes que amenazan con exponen una falta de unidad que podría poner en peligro la credibilidad de la organización militar.
Macron insistió en que en la reunión deben abordarse cuestiones estratégicas como la mejora de la relación con Rusia y cómo lidiar con un aliado impredecible como Turquía.
Por su parte, el presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, arremetió contra Macron en un enfrentamiento público que supone un mal augurio para la reunión organizada por el primer ministro británico, Boris Johnson, que está inmerso en una campaña electoral y quiere suavizar la situación.
Ankara enojó a sus aliados al invadir el norte de Siria y comprar sistemas de defensa aérea a Rusia, que cuentan con potentes computadoras que recopilan datos y podrían comprometer a los equipos militares de los aliados si están estacionados cerca.
Antes de viajar a Londres, Erdogan sugirió que Turquía podría no respaldar a Polonia y a los aliados bálticos _ Estonia, Letonia y Lituania _ el que caso de que soliciten defensa a menos que los aliados apoyen la preocupación de Ankara hacia los combatientes kurdos sirios a los que considera terroristas.
Esta amenaza platea nuevas dudas en torno al compromiso de la OTAN con su cláusula de defensa colectiva, su Artículo 5, por la que los aliados se comprometen a ayudar a un miembro que esté siendo atacado. La cláusula solo se active en una ocasión: tras los atentados del 11-S en Estados Unidos.
La cumbre de dos días comenzará con recepciones en el Palacio de Buckingham y en Downing Street más tarde en el día. Se celebrará una breve sesión de trabajo en un resort de golf a las afueras de Londres el miércoles.
El secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, y algunos líderes participaron en un acto el martes en la mañana.