En un intento de sofocar las protestas contra China, en Hong Kong fueron arrestados dos dirigentes por la democracia el viernes por la mañana (hora local) y liberados bajo fianza varias horas después, en tanto las autoridades negaron la autorización para celebrar una importante marcha prevista para el sábado.
Joshua Wong y Agnes Chow deberán responder a cargos de participar e incitar a otros a participar el 21 de junio en una manifestación no autorizada frente a una comisaría. El joven también está acusado de organizarla.
«Todo lo que pedimos es instar a Beijing y al gobierno de Hong Kong a retirar el proyecto de ley (de extradición), detener la brutalidad policial y responder a nuestros llamados a elecciones libres», señaló Wong tras su liberación.
De la misma manera, la activista instó a la comunidad internacional «a enviar un mensaje claro al presidente Xi: enviar tropas o usar una ordenanza de emergencia no es la salida».
Wong fue uno de los dirigentes estudiantiles del Movimiento de los Paraguas, las grandes manifestaciones por la democracia en 2014, y actualmente se desempeña como secretario general del partido Demosisto. Chow, por su parte, es una miembro destacada de la misma colectividad.
La policía detuvo a Andy Chan, otro dirigente del movimiento, en el aeropuerto el jueves por la noche, y a otras tres personas días atrás por actos de vandalismo en las oficinas de la legislatura el 1 de julio.
Marcha no autorizada
Los organizadores de la marcha del sábado, en el quinto aniversario de una decisión de Beijing de no permitir elecciones totalmente democráticas para jefe de gobierno de Hong Kong, la cancelaron después que una junta de apelaciones denegó el permiso.
No estuvo claro por el momento si los inconformes se congregarán igual para una manifestación no autorizada.
Bonnie Leung, del Frente Civil de Derechos Humanos, dijo que el grupo no tenía otra opción más que cancelar la protesta ante la preocupación por la seguridad física y legal de los asistentes.
“La primera prioridad del Frente Civil por los Derechos Humanos es garantizar la seguridad física y legal de todos los que participan en nuestras marchas”, afirmó.
El colectivo había solicitado permiso para marchar hasta la oficina de enlace del gobierno chino en el territorio semiautónomo. El acto buscaba conmemorar el quinto aniversario de la decisión de Beijing de no permitir elecciones democráticas plenas para el cargo de jefe ejecutivo de la ciudad.
La policía ha rechazado otros pedidos de autorización de actos y marchas con el argumento de que hubo incidentes de violencia durante o después de algunas de las manifestaciones anteriores. También está arrestando gente por su participación en las protestas de los últimos meses.