Son más de mil los participantes de esta plataforma, que busca cambiar la política y que en pocas semanas, ha tenido una gran aceptación no sólo entre los ciudadanos, si no también entre varios políticos que ya se inscribieron y la están utilizando.
Se trata te Lágora, la aplicación que quiere revolucionar la política chilena y que busca ser el lugar donde todos muestren sus propuestas ciudadanas, discutan sobre éstas, hacerlas públicas para conseguir el interés en éstas, realizar debates y ahora ser un semillero de nuevos políticos.
Porque desde el mes de junio Lágora sumará a su plataforma la «Sección de Futuros Candidatos», donde justamente se invita a quienes se sientan capacitados de ocupar un cargo público, a presentarse y mostrar sus propuestas.
Una nueva sección para nuevos rostros
“Hoy es necesaria la aparición de nuevos rostros que renueven la política y que también renueven las propuestas. Es por eso que creamos este espacio, para que estas personas, hoy desconocidas, pero que crean que son idóneos para esta tarea, se muestren, den a conocer y por qué no, se transformen en los futuros candidatos de una elección municipal o parlamentaria. La idea es que aquellos que hoy critican la política, mañana se inspiren en cambiarla”, señala Diego Brashe, responsable de Lágora.
Brashe explica las razones que tuvieron para crear la Sección de Futuros Candidatos:
- 1. Lágora tiene por objetivo ser un semillero de nuevos políticos: Hoy todos sabemos que es necesario la aparición de nuevos rostros y liderazgos en la política. De hecho esto se complementa perfectamente con la ley de reelección que se anunció en ultima cuenta anual.
- 2. El período de campaña, NO es tiempo suficiente para conocer las propuestas de los distintos candidatos y menos para debatir y conversar sobre ellas.
- 3. Las Palomas o pendones que se utilizan durante el periodo de propaganda electoral, NO sirven para informar.
- 4. Es caro ser candidato, son varios los millones que se invierten en ello, Lágora permite un espacio que aporta a la difusión su trabajo a un precio que tiende a cero en comparación al costo total de una campaña.
