El fiscal nacional Jorge Abbott respondió en duros términos el “téngase presente” enviado por el subsecretario del Interior, Mahmud Aleuy, en el que a su vez la autoridad de Gobierno criticó enfáticamente la actuación de los fiscales en la audiencia del 9 de febrero pasado por el cierre de la “Operación Huracán”.
En un documento de 12 carillas, Jorge Abbott le recuerda al subsecretario Aleuy la autonomía de los fiscales para investigar y cuestiona al Ministerio del Interior por la “falta de reacción” frente actuaciones de Carabineros, que fue el principal reproche de la fiscalía en la mencionada audiencia que se realizó en Temuco.
En su oficio, Abbott responde a las acusaciones de Interior contra el fiscal jefe de Alta Complejidad de Temuco, Luis Arroyo, sobre el uso de su cargo e información para elaborar una querella en que acusa montaje de Carabineros en su investigación por la filtración de antecedentes a Héctor Llaitul, de la CAM.
“La fuerte imputación que Ud. dirige contra el fiscal Arroyo, máxime en las circunstancias que se han expresado en este oficio, no se condice tampoco con la falta de reproche a la actuación del general Gonzalo Blu, que ha liberado información de inteligencia contenida en 1.100 correos, de diversas causas tramitada en el país, para que sea utilizada en la actividad de defensa de sus propios funcionarios, imputados de la comisión de delitos”, responde Abbott.
Agrega que “la Fiscalía de Chile estará siempre dispuesta a cumplir cabalmente el rol que la Constitución Política de la República le ha asignado, esto es, la investigación de los hechos que revistan caracteres de delito, lo hará de manera contundente, pero apegada al marco legal y, básicamente, a los mismos principios consagrados en la Carta Fundamental, esto es, con pleno respeto a los derechos fundamentales que emanan de la naturaleza humana”.
En cuanto a la misma “Operación Huracán”, Abbott expresa que “no resulta y no resultará tolerable a la institución que dirijo, la persecución penal a cualquier costo y con evidente vulneración a los derechos de las personas y, de encontrarnos en presencia de vulneraciones que constituyan, a su vez, acciones delictivas, ejerceremos la persecución penal con total independencia de quién se trate, sea desde un auxiliar del Ministerio Público en la investigación, como ha ocurrido en el presente caso, de cualquier funcionario público o de los propios integrantes de esta Fiscalía”.
Además, el fiscal nacional expresa que “no resulta aceptable la reacción del Director de Inteligencia de Carabineros de Chile, señor Gonzalo Blu, cuando el día 26 de Enero del presente imputa a nuestra institución el ‘amparar a aquellas personas que se han dedicado a causar miedo en regiones del sur del país’ y hace un llamado al órgano jurisdiccional a desatender peticiones efectuadas por la Fiscalía, en el marco de sus atribuciones constitucionales y legales”.
Según Abbott, ese punto de prensa del general Blu fue “un acto planificado y convocado especialmente para tales fines. No puede ser más palmaria la violación, en tal sentido, del artículo 7° de la Constitución Política de la República, que usted mismo ha citado, sin embargo, ninguna, absolutamente ninguna reacción hubo por parte de ese Ministerio, respecto a una repartición que es de su dependencia, a diferencia de este extenso ‘Téngase presente’ en el que, incluso, parecen cuestionarse facultades exclusivas de un órgano autónomo del Estado como lo es el Ministerio Público”.
El fiscal nacional también reprocha lo ocurrido el 26 de enero pasado en Temuco, cuando Carabineros impidió los allanamientos a la unidad de Inteligencia, a pesar de que contaba con la correspondiente autorización judicial. “La Fiscalía intenta, con la correspondiente autorización judicial, realizar diligencias de investigación que son repelidas, prácticamente, con algo parecido a los ‘ejercicios de enlace’ propios de otra época. Y no puede entenderse, nuevamente, la falta de reacción a este respecto de ese Ministerio, del cual precisamente depende Carabineros de Chile”, indica Abbott.
Abbott también respalda las decisiones del fiscal regional de La Araucanía, Cristián Paredes, de cerrar la investigación y no perseverar al darse cuenta de que podía existir prueba viciada. “No nos resulta concebible que un querellante que forma parte de un poder del Estado quiera mantener vigente una investigación en virtud de prueba falsa, de antecedentes adulterados. Si bien es cierto ello constituye materia de una investigación vigente, creemos que ante la simple sospecha de una vulneración tan notoria a los derechos de las personas y, sobre todo lo más grave, el daño al sistema mismo, la mayor preocupación debiera ser el esclarecimiento de esta situación”, enfatiza el fiscal nacional.
Añade que “en eso ha estado esta Fiscalía y hemos adoptado la decisión que técnica y legalmente corresponde, hemos señalado que no contamos con evidencia válida que nos permita sostener una imputación penal en estos momentos, no hemos sostenido la inocencia de las personas involucrados ni la ausencia de delito. En tal sentido, señor Subsecretario, las reacciones que sí parecen ‘inusitadas’ son las previamente referidas”.
También consigna que “se nos reprocha, fuertemente, que los fiscales de La Araucanía hayan reclamado una falta de actividad por parte de dicha repartición. Sin embargo, seguimos observando que en la causa RUC1800119729-7, de San José de la Mariquina, ya formalizada en contra de ex funcionarios de Carabineros y con medidas cautelares vigentes, no se haya desplegado actividad alguna. Lamentamos que, ante hechos tanto o más graves que lo imputados en lo que podemos llamar ‘Huracán I’, de evidente vulneración de derechos y recolección de evidencia prácticamente absurda, no exista actividad alguna por parte de ese Ministerio”.
En todo caso, Abbott reitera que no cree que exista una pugna entre Carabineros y el Ministerio Público, sino que se trata de situaciones concretas que afectan a ciertos funcionarios o ex funcionarios de la institución y, en ese sentido, “resulta más que lamentable que se siga tolerando la instalación de esa pugna. Máxime cuando tenemos claro nuestro rol constitucional y legal”.