El presidente del gobierno español Mariano Rajoy advirtió el lunes que el gobierno mantendrá el control de Cataluña si el ex líder regional, que fue destituido por trabajar por la independencia, trata de reasumir sus funciones desde Bruselas, donde está eludiendo la justicia española.
Rajoy dijo el lunes que el nuevo presidente tendría que ser juramentado en persona. Añadió que el gobierno español continuará invocando su autoridad constitucional para gobernar Cataluña hasta que eso suceda.
El ex presidente catalán Carles Puigdemont quiere presentar su candidatura para su antiguo puesto por video o por medio de un delegado para evitar regresar a España y ser arrestado. El ex líder fue reelegido durante una sesión parlamentaria el mes pasado tras hacer campaña desde Bruselas.
Las regulaciones de la asamblea catalana no dejan claro si un candidato puede ser considerado en ausencia. Los sectores anti independencia de Cataluña y el gobierno de Rajoy han dicho que llevarán el asunto ante la Corte Constitucional de España si los legisladores votan sobre Puigdemont.
El nuevo parlamento se va a reunir por primera vez el jueves. La votación inicial para elegir al próximo presidente de Cataluña se realizará muy probablemente a finales de mes.
Crisis catalana
Los partidos secesionistas de nuevo ganaron la mayoría de los escaños en las elecciones del 21 de diciembre convocadas por el premier bajo poderes temporales tras la destitución de Puigdemont y del parlamento regional.
Ocho de los legisladores, incluyendo Puigdemont, han escapado de España o están en la cárcel en espera de posibles cargos de rebelión o sedición. Otros ex miembros del gabinete y funcionarios del parlamento han sido excarcelados, pero siguen bajo investigación.
Los partidos que promueven la independencia catalana tienen conjuntamente 66 de los 135 escaños en la legislatura regional y tienen el respaldo de cuatro partidos pro independencia anti-establishment.
La crisis de Cataluña, la mayor en España en décadas, llegó a su punto álgido cuando los legisladores separatistas declararon la independencia el 27 de octubre sobre la base de los resultados de un referéndum que las cortes españolas habían suspendido.
Puigdemont persiste en sus intenciones de proceder con la formación de una república catalana separada de España. Sin embargo, casi todos los legisladores electos bajo investigación han prometido que actuarán dentro los márgenes de la ley de ahora en adelante.
Los sondeos han mostrado consistentemente que la mayoría de los catalanes quieren el derecho a decidir el futuro de la región, pero están parejamente divididos sobre la independencia.
