Muñecas barbies y personajes de Disney «protestaron» este lunes en Bogotá en contra del abuso sexual de menores como parte de una iniciativa para concienciar a los colombianos sobre este delito, que según fuentes oficiales viene en alza.
Unos 500 juguetes y peluches fueron situados en la Plaza de Bolívar, en el corazón político de Bogotá, como parte de una protesta de Aldeas Infantiles SOS Colombia para «alzar la voz» contra este crimen, dijo a AFP la directora de esta ONG, Ángela Rosales.
«Los juguetes tienen los testimonios de los niños y las niñas, pueden contar lo que les pasa a los niños y las niñas, y pueden traer la voz de los niños que están siendo vulnerados», afirmó la directiva de esta organización que trabaja en 135 países por la protección de la infancia.
Según Rosales, el objetivo de usar juguetes también era llamar la atención de las familias porque los abusos y violaciones se presentan «principalmente» en las casas de los menores y son realizados por seres queridos o personas cercanas.
Muchos de estos delitos «no se denuncian por ser miembro de la familia o porque los niños» temen hablar, explicó.
Los peluches o muñecos estaban acompañados de carteles con testimonios reales de menores víctimas de redes internacionales de pedofilia o violaciones en sus colegios.
«Muchas veces los padres son culpables porque no les creen» a los niños, señaló Viviana Mosquera, una madre cabeza de familia que observó el plantón, realizado en el marco del Día Universal del Niño, celebrado cada 20 de noviembre por Naciones Unidas.
Entre enero y octubre, en Colombia se realizaron 19.631 exámenes médicos para determinar abusos sexuales. De ellos, 17.130 se practicaron en menores de 17 años, según el estatal Instituto de Medicina Legal.
En el mismo periodo del año anterior, el organismo forense hizo evaluaciones a 15.237 menores de edad, lo que representa un alza del 11%.