Ante un nuevo ataque armado que cobró la vida de 26 personas en una iglesia de Texas, vuelve a surgir el debate del uso de armas en Estados Unidos, una problemática que el presidente del país se niega a mirar.
Tan solo en Estados Unidos hay más de 300 millones de armas entre 325,365,189 habitantes del país norteamericano, cifra que es dramática si se considera que están involucradas en unas 30 mil muertes al año, de las que dos tercios son suicidios.
La historia se ve aún peor si se considera que al día 315 personas reciben disparos en EEUU producto de asesinatos, asaltos, suicidios, tiroteos involuntarios e intervención policial, de los que 93 mueren y 222 solo salen heridos, de acuerdo a la campaña contra las armas Bradi.
Tan solo este domingo 5 de noviembre ocurrieron 81 incidentes con armas, en los cuales se registraron 35 víctimas fatales sin contabilizar los 26 muertos del tiroteo en la iglesia en Texas, según datos de Gun Violence Archive.
Sin embargo, Donald Trump, aseguró el lunes que «es un poco pronto, pero está claro que nos encontramos ante un problema de salud mental de alto nivel. Tenemos muchos problemas de salud mental en nuestro país, pero no es una situación imputable a las armas (…). Es algo que hay abordar de manera seria».
«Un derecho constitucional»
Entonces, con tan pésimas cifras… ¿por qué los estadounidenses siguen defendiendo el uso de armas? El principal motivo que esbozan quienes usan este tipo de elementos es la defensa personal.
La cultura estadounidense entiende que tener un arma es un derecho garantizado por la Segunda Enmienda a la Constitución.
Para los primeros estadounidenses «un arma era una herramienta», afirma David Courtwright, un profesor de historia en la Universidad de North Florida y autor de «Tierra violenta: hombres solos y desorden social desde la frontera a la ciudad».
«Los hogares de la frontera sin algún tipo de arma de fuego eran una rareza y algunos piensan que esa herencia sigue funcionando», agregó.
De esta manera es fácil comprender que cuatro de cada 10 estadounidenses viven en una casa donde hay un arma, según un estudio divulgado en junio por el Pew Research Center. El 67% de los poseedores de armas alega que la autoprotección es el principal motivo para tenerlas.
De acuerdo a una comparación recogida por GunPolicy, al año 2007 EEUU se llevaba el primer puesto en un ranking de 178 países, que comparaba el número de armas que estaban en posesión de civiles.