Mientras la bandera independentista prolifera en calles y fachadas de Cataluña y la española se multiplica en el resto del país, una nueva insignia compartida lucha por ganarse un sitio en los balcones apostando por un arma potente para desactivar la crisis entre Madrid y Barcelona: el diálogo.
Miles de personas salieron hoy a las calles de diferentes ciudades españolas en demanda de unidad y diálogo para solucionar el conflicto entre el Gobierno de España y el de Cataluña.
Convocados por la plataforma ciudadana «Hablamos» y vestidos de blanco miles de ciudadanos se agruparon frente a los ayuntamientos de las principales capitales para pedir «sensatez» y «diálogo» entre ambas administraciones.
Barcelona y Madrid fueron las que acogieron las concentraciones más importantes en las que se lanzaron proclamas como «el pueblo catalán no quiere división», «sí se puede» o «queremos hablar».
Protests in Madrid and Barcelona asking for dialogue. "No flags. No hate. No violence". #ParlemHablamos pic.twitter.com/gJM91iUC84
— JA Bayona (@FilmBayona) October 7, 2017
Además, los manifestantes, en un tono pacífico y sin exhibir banderas españolas, catalanas ni independentistas, mostraron carteles contra la declaración unilateral de independencia y con lemas como «España es mejor que sus gobernantes».
En declaraciones a Efe, uno de los promotores de esta manifestación, Guillermo Fernández, explicó que con esta convocatoria se quiere reclamar «sensatez» y una rebaja del ritmo, porque «va muy rápido» y ahora es el momento de «la cordura y de hablar».
«Los gobernantes no pueden seguir por este camino, porque nos están dividiendo y envolviendo en banderas para hacernos chocar. Este país no lo merece», aseguró Fernández.
Además de diálogo, cientos de ciudadanos se congregaron en la Plaza de Colón de Madrid con banderas españolas en un acto en defensa de la unidad de España, la Constitución y el estado de derecho.
Convocados por la Fundación para la Defensa de la Nación Española (Denaes), los manifestantes colocaron una bandera de España en el suelo de la plaza y exhibieron pancartas con la palabra «Golpistas» y fotografías de los componentes del Ejecutivo catalán y el jefe de la policía autonómica, Josep Lluis Trapero.
Las concentraciones se replicaron en otras capitales españolas como Zaragoza, Valencia, San Sebastián o Logroño.