La base militar de Estados Unidos en Guantánamo, en el sudeste de Cuba, superó el paso del poderoso huracán Irma por la costa norte de la isla sin sufrir grandes daños, informó hoy el capitán de marina Dave Culpepper, comandante de la base.
En un mensaje por Radio Gitmo a sus cerca de 5.500 residentes, Culpepper indicó que la base no tiene «daños de relevancia» y que confía en que recupere pronto la total normalidad.
Irma tocó tierra anoche en Camagüey, archipiélago del norte de Cuba, como categoría de intensidad 5, la máxima, con vientos máximos de hasta 260 kilómetros por hora. Desde entonces, el ciclón, que se ha debilitado hasta los 205 kilómetros por hora, recorre la costa norte de Cuba hacia el oeste. El capitán de marina decidió no abrir refugios al considerar que no había previsiones de «vientos destructivos».
El hospital de la base publicó una fotografía en su página de Facebook en la que se ve un cartel luminoso que dice «¡Adiós, adiós Irma!». Por el momento no hay noticias de la prisión de la base, donde permanecen detenidas 41 personas, indicó el diario Miami Herald.
Este huracán, el más poderoso registrado nunca en el Atlántico, ha dejado al menos 25 muertos a su paso por las Antillas Menores y Puerto Rico, y ha destruido la isla de Barbuda y la parte francesa de San Martín.
