En septiembre del año pasado, es probable que el presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ya visualizara lo que se viviría en su país. En un discurso dado en cadena nacional, el mandatario expresó entre risas “La dieta de Maduro te pone duro», aludiendo a la delgadez de un miembro del Partido Socialista Unido de Venezuela.
De esta forma se refería al régimen alimenticio que impuso como medida de mitigación debido a la escasez de alimentos, a una inflación superior a 700% y a los salarios insuficientes que no alcanzan para cubrir la canasta básica.
El resultado llevó a una dieta insuficiente que no alcanza las 2.000 calorías diarias que debe ingerir cada persona, independiente del país donde resida. Hecho que conllevó a que el 74,3% de la población ha perdido al menos unos 8,7 kilos de peso de forma no controlada en el último año, mientras que las personas más pobres afirman que han bajado más de 9 kilos, de acuerdo a los datos entregados con la Encuesta Condiciones de Vida 2016 (Encovi).
De acuerdo con el estudio, en Venezuela existen unos 9,6 millones de venezolanos que comen dos o menos comidas al día con una escasez de proteínas en sus platos.
Pero estos datos no quedan solo en los porcentajes…
Venezolanos recogen comida desde la basura
Este martes desde Santo Domingo, el presidente de la Asamblea Nacional de Venezuela, Julio Borges, aseguró que cerca de tres millones de sus compatriotas «escarban» diariamente en la basura para poder comer, y que la situación de su país se ha convertido en un problema para la región.
«No es una metáfora lo que le estoy contando, en Venezuela no hay ni alimentos ni comida, según estudios de opinión cerca de tres millones de venezolanos escarban diariamente en los basureros en busca de comida», expresó el legislador en una visita al Congreso Nacional dominicano.
Esta situación que se vive en Venezuela, en palabras de Borges, ha causado que muchos de sus compatriotas migren hacia países como Brasil, Chile, Colombia, Panamá, Aruba y República Dominicana, lo que causaría desajustes en los países que reciben a estos migrantes.
«Esto sucede por un Gobierno que ha puesto a su pueblo a verse en la necesidad de tener que huir hacia otras fronteras, debido al hambre y falta de medicinas, siendo Venezuela un país tan rico en gas, diamantes, oro y petróleo», destacó el diputado opositor venezolano.
Ayuda desde la OMS
También este martes, el parlamento de Venezuela solicitó a la Organización Mundial de la Salud (OMS) en Washington el envío de «ayuda humanitaria», y que el organismo evalúe in situ la «profunda» crisis sanitaria.
«Venimos (…) a solicitar formalmente la ayuda humanitaria para Venezuela en términos de medicinas y material médico quirúrgico», informó a la AFP el diputado José Manuel Olivares, quien preside la subcomisión de Salud de la Asamblea Nacional, controlada por la oposición.
«Hoy mueren venezolanos por falta de medicinas e insumos médicos en hospitales públicos», denunció el parlamentario, afirmando que el gobierno no ha dispuesto del fondo rotatorio de la OMS para adquirir medicamentos a menor costo.
Otros factores de esta emergencia
La escasez de preservativos y pastillas anticonceptivas supera el 80% y 95% respectivamente, nueve regiones del país carecen de tratamientos de radioterapia y hasta 20 medicamentos contra el cáncer escasean, estimó. En consecuencia, Venezuela tiene los índices más altos de embarazo precoz y de VIH de la región, estimó Olivares.
El diputado también denunció que el Gobierno de Maduro no tiene «ninguna» estrategia para combatir el virus del Zika, ya que no existirían protocolos de tratamiento y transparencia en las estadísticas.
Mientras el gobierno contabiliza unos 5.200 casos sospechosos de zika, los opositores estiman que más 400.000 personas podrían estar infectadas por el virus, que ya es responsable de tres muertes en el país petrolero.
Venezuela atraviesa una profunda crisis económica, agudizada por la caída en las exportaciones de crudo en un país que depende de las importaciones.
