“¡Visítanos! Abrimos todos los días del año. Contamos con todas las medidas de seguridad”, decía un gran letrero a la entrada del mercado de fuegos artificiales ubicado en Tultepac, México.
Justamente hace una semana, el gobierno municipal de Tultepec se jactaba de que su mercado era el “más seguro” de su tipo en América Latina, según publicó el diario mexicano El Universal.
El secretario de Salud del Estado de México, César Gómez Monge, informó durante esta jornada que otra víctima falleció en el hospital, subiendo a 32 el número de personas muertas. Además, otras 46 personas permanecen hospitalizadas, de las cuales cinco están en estado muy grave.
De los heridos, diez de ellos son menores, incluida una niña que tiene el 90% de su cuerpo quemado. Sólo 18 de los cuerpos encontrados pudieron ser identificados y entregados a sus familiares, mientras que los 14 restantes quedaron con tal nivel de heridas, que será necesario realizar diversos perfiles géneticos para corroborar sus identidades.
Las autoridades esperaban que durante este año se vendieran alrededor de 300 toneladas de productos desde agosto hasta fin de año, temporada alta para este tipo de comercio. Sin embargo, la magnitud de la explosión dejó totalmente destruidos al 80% de los locales.
El mercado de San Pablito abrió sus puertas hace 16 años, pero la localidad de Tultepec se dedica a la fabricación y comercialización de pirotecnia desde hace dos siglos, una industria a la que se dedica 65% de su población de forma directa o indirecta.
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