La Cámara de Casación Penal argentina, máximo tribunal penal del país, celebra mañana la audiencia en la que se decidirá si se reabre o no la denuncia que presentó el fallecido fiscal Alberto Nisman contra la ex presidenta Cristina Fernández por presunto encubrimiento de terroristas.
Se trata de la acusación que formuló el procurador el 14 de enero de 2015, cuatro días antes de ser hallado muerto en su casa con un disparo en la cabeza en circunstancias aún por esclarecer, contra Fernández y otros ex dirigentes por encubrir a los autores del ataque contra una mutua judía que dejó 85 muertos en Buenos Aires en 1994.
En su escrito, el fiscal sostenía que un acuerdo suscrito entre Argentina e Irán en 2013 y que el Gobierno aseguraba que serviría para avanzar en el esclarecimiento del ataque, buscaba en realidad eliminar las líneas rojas que la Interpol mantenía sobre los sospechosos iraníes, a cambio de impulsar el intercambio comercial.
Tal memorándum nunca fue ratificado por Irán y, en Argentina, después de ser aprobado por el Parlamento, fue declarado inconstitucional por la Justicia.
Esos fueron los argumentos del juez federal Daniel Rafecas para desestimar la denuncia poco después de la muerte del fiscal, motivos que ratificaron dos instancias superiores más tarde, ante un segundo intento de la Daia (Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas), y el fiscal Germán Moldes de reimpulsar la denuncia.
No obstante, la Daia y Moldes recurrieron la decisión ante Casación Penal, que decidió convocar una audiencia para debatir si el contenido de las acusaciones de Nisman tiene la contundencia suficiente como para abrir una investigación penal contra Fernández y, entre otros, el ex canciller Héctor Timerman.
El propio Timerman presentó un recurso a la decisión de Casación Penal para que se pospusiera la audiencia fijada para el 19 de diciembre en el que alegó presunto incumplimiento de los plazos para convocar la cita de mañana, un extremo que rechazó de plano el tribunal el pasado martes.
Así, los jueces del máximo tribunal penal argentino comenzarán a debatir sobre la denuncia de Nisman a partir de mañana.
La audiencia llega precedida de polémica. La semana pasada, Casación Penal decidió renovar a su cabecera de jueces en 2017, una decisión que afecta a los magistrados Mariano Borinsky y Gustavo Hornos, encargados de resolver la reapertura de la denuncia de Nisman.
Sin embargo, según detalló la agencia oficial Télam tras conocerse la renovación, que también releva a los jueces encargados de causas que involucran a Fernández en tramas de corrupción como Hotesur o Los Sauces, no se prevé que queden apartados de la investigación de Nisman si sigue adelante.
De acuerdo con fuentes judiciales citadas por Télam, la denuncia seguirá a cargo de esos magistrados porque ya tiene audiencia convocada para el 19 de diciembre próximo, todavía en 2016, para escuchar a las partes.
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