El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, ha llegado esta mañana a Atenas en lo que supone la primera etapa de su última gira internacional en la que llevará un mensaje claro: el de que su sucesor en la Casa Blanca, Donald Trump, está comprometido con mantener las relaciones con los socios estratégicos y la OTAN.
Se espera que en sus entrevistas bilaterales Obama dé un espaldarazo a las aspiraciones de Grecia de obtener un alivio de su deuda pública. La estancia de Obama en Atenas coincide con la llegada de los acreedores que reanudan hoy la segunda evaluación del programa de medidas asociado al rescate.
El avión presidencial aterrizó en el aeropuerto de Eleftherios Venizelos a las 10.30 hora local (08.30 GMT), donde fue recibido con honores militares por el ministro de Defensa, Panos Kammenos. A continuación, la comitiva de Obama se trasladó al hotel donde el presidente se alojará esta noche. Su primera jornada en Atenas comenzará este mediodía con una bienvenida en el palacio del presidente griego, Prokopis Pavlópulos, a la que seguirá una reunión y posterior rueda de prensa con el primer ministro, Alexis Tsipras. Su primera jornada en Atenas concluirá con una cena en su honor ofrecida por Pavlópulos, a la que han sido invitadas un centenar de personalidades de la política, la cultura y el mundo empresarial.
El miércoles por la mañana Obama tiene previsto visitar la Acrópolis y posteriormente ofrecerá un discurso al “pueblo de Grecia”. Según adelantó la Casa Blanca, Obama usará ese discurso para hablar de los resultados de las elecciones en EE.UU. y del Brexit, así como, a modo más general, de los beneficios y desafíos de la globalización, al igual que hizo en septiembre en su última intervención ante la Asamblea General de la ONU.
La visita está rodeada de grandes medidas de seguridad, que incluyen el cierre del espacio aéreo griego desde esta mañana hasta el miércoles por la tarde.
Obama ofreció anoche una conferencia de prensa desde la Casa Blanca, la primera desde las elecciones presidenciales de la semana pasada, ganadas inesperadamente por Trump. En la conversación que ambos mantuvieron en el Despacho Oval el pasado jueves, Trump le transmitió, según contó hoy Obama, su “gran interés” en mantener las “relaciones estratégicas básicas” de EEUU a nivel internacional. Pero, además, Obama detalló que el ya presidente electo le expresó su “compromiso con la OTAN y la alianza Transatlántica”.
Por ello, Obama explicó que hará saber en esta gira a sus aliados europeos que “no hay un debilitamiento de la determinación cuando se trata del compromiso de Estados Unidos con mantener una relación fuerte y robusta con la OTAN”. Durante la campaña electoral, Trump calificó a la OTAN de un organismo “obsoleto” y demandó a los países miembros que “paguen su parte” si no quieren defenderse solos.
La gira de despedida de Obama, a quien le quedan apenas dos meses de mandato, se planificó con una confianza muy alta, tanto dentro como fuera de EEUU, en que la demócrata Hillary Clinton iba a ser la vencedora en las elecciones presidenciales frente a Trump.
Pero ganó el magnate y su victoria “será el tema principal en la mente de todos dondequiera que vayamos”, reconoció el asesor adjunto de seguridad nacional de Obama, Ben Rhodes, en una conferencia telefónica con periodistas para ofrecer detalles del viaje presidencial.
También quiere aprovechar Obama esta gira para explicar que “ahora mismo, a nosotros como estadounidenses, nos interesa que el gobierno entrante tenga éxito y, francamente, al mundo le interesa que a Estados Unidos le vaya bien, dado el papel de liderazgo que jugamos”, insistió Rhodes.
Obama partirá de Washington a última hora de la tarde de este lunes y llegará a Atenas en la mañana del martes para realizar la primera visita oficial de un presidente estadounidense a Grecia en 17 años.
El mandatario celebrará encuentros bilaterales con el primer ministro griego, Alexis Tsipras, y con el presidente de la República, Prokopis Pavlópulos, y durante la jornada del miércoles visitará la Acrópolis y dará un discurso “al pueblo de Grecia”.
Rhodes anticipó que Obama usará ese discurso para hablar de los resultados de las elecciones en EEUU y del Brexit, así como, a modo más general, de los beneficios y desafíos de la globalización, al igual que hizo en septiembre en su última intervención ante la Asamblea General de la ONU.
La votación de junio pasado a favor del Brexit (la salida del Reino Unido de la Unión Europea) también estará en la agenda de Obama en Alemania, adonde llegará el jueves para reunirse con la canciller de ese país, Angela Merkel.
El viernes Obama celebrará en Berlín una cumbre “con sus más estrechos aliados europeos”, en la que participarán Merkel, el presidente francés, François Hollande; el primer ministro italiano, Matteo Renzi, el presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy, y la primera ministra británica, Theresa May.
Con ellos Obama prevé abordar, además de los resultados electorales en EEUU, la campaña militar contra el grupo yihadista Estado Islámico (EI), la crisis de los refugiados y los próximos pasos a dar en Siria, según la Casa Blanca.
La última etapa de la gira de Obama será Perú, donde el mandatario participará durante el fin de semana en la cumbre de líderes del Foro de Cooperación Económica Asia-Pacífico (APEC).
Allí Obama, que tendrá bilaterales con los presidentes chino, Xi Jinping, y peruano, Pedro Pablo Kuczynski, y con el primer ministro australiano, Malcolm Turnbull, insistirá en la importancia de que EEUU mantenga su compromiso con Asia-Pacífico, una región a la que él ha dado prioridad durante su mandato.
PUB/IAM