«Una de las razones por las que me resistía a volver a asumir un cargo de ministro de Estado, es el tiempo que uno tiene que perder para andar respondiendo leseras que dicen algunos parlamentarios”. A través de su particular y locuaz estilo, el ministro de Justicia, Jaime Campos, respondió a la denuncia realizada por el diputado Nicolás Monckeberg, quien señaló que el nuevo secretario de Estado pertenecería a la firma de abogados que representa a la empresa encargada de suministrar servicios tecnológicos al Registro Civil, y que es cuestionada por los cambios de domicilio electoral que afectan a casi 500 mil personas.
«No soy, ni he sido, abogado, consultor ni tengo relación de ninguna especie con la empresa que el diputado Monckeberg menciona. Su denuncia es absolutamente falsa”, aseveró.
La autoridad fue categórica en afirmar que no pertenece a ninguna sociedad profesional, y detalló que con el abogado Francisco Zúñiga, a quien Monckeberg relaciona a Campos en la presunta empresa, sólo lo une una “comunidad de techo”. “En la que junto con otros colegas somos los dueños del inmueble donde está la oficina profesional de él y mi despacho profesional, pero cada cual atiende a sus propios clientes y no tengo mayor conocimiento de quienes son los suyos”, explicó.
«Entiendo que estamos en política, pero antes de hacer acusaciones de esta naturaleza, es bueno que se informen un poquito más y no anden haciendo acusaciones al voleo”, sentenció.
Dado un “estricto celo profesional”, Campos comunicó que solicitó a todos los colegas con quienes compartía oficinas, un listado de los clientes con quienes trabajan, con el objetivo de evitar próximos mal entendidos.