El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, se despidió este martes de la Asamblea General de la ONU con un dramático llamado a sostener los esfuerzos de la diplomacia para contener la violencia en Siria.
Obama dejará la Casa Blanca a quien resulte vencedor de las elecciones presidenciales de noviembre en Estados Unidos, y este martes, en su último discurso ante la ONU, pidió a la comunidad internacional que apoye los esfuerzos de diplomacia en el conflicto sirio.
«En un lugar como Siria no se puede alcanzar una victoria militar, y tenemos que continuar con la difícil tarea de la diplomacia que se propone interrumpir la violencia y hacer llegar ayuda a aquellos que la necesitan», expresó el mandatario.
El discurso de Obama tuvo lugar poco después que cancilleres de 23 países realizaran una reunión de urgencia en un hotel de Nueva York para tratar de mantener de pie el endeble cese del fuego en Siria negociado por Estados Unidos y Rusia y que duró escasamente una semana.
Ministros que participaron de la reunión dijeron a la prensa que el clima del encuentro fue tenso, y el secretario estadounidense de Estado, John Kerry, se limitó a declarar a la prensa a la salida que «el cese del fuego no está muerto».
Las partes, presentes en Nueva York para la Asamblea General de la ONU, esperan poder volver a reunirse durante esta semana.
– Atención a los refugiados –
Sin embargo, en su pronunciamiento Obama no ahorró críticas a Moscú, su principal asociado para hallar una salida a la tragedia siria.
De acuerdo con Obama, Rusia busca recuperar «su gloria pasada por la fuerza», y ello pone presión en las relaciones internacionales.
«Si Rusia continúa interfiriendo en los asuntos internos de sus vecinos, eso podrá ser popular en su país. Podrá impulsar fervor nacionalista por algún tiempo. Pero con el paso del tiempo, también va a disminuir su estatura y hacer que sus fronteras sean menos seguras», dijo Obama.
El presidente estadounidense también pidió a la comunidad internacional que fortalezca sus esfuerzos en favor de los millones de refugiados.
«Juntos tenemos que abrir nuestros corazones y haber más para ayudar refugiados que están desesperados por un techo», dijo Obama.
La comunidad internacional, añadió, debe recibir de brazos abiertos las declaraciones de intención en ayudar. «Pero tenemos que ir a fondo, aún cuando las políticas sean difíciles. (…) Debemos imaginarnos como sería con nuestra familia, con nuestros hijos», acotó.
Obama también pidió poner en práctica el acuerdo de París sobre el clima lo antes posible, para señalar que «si no actuamos enérgicamente, tendremos emigraciones masivas y ciudades sumergidas y naciones desplazadas y reservas de alimentos diezmados».
– Sentimiento de insatisfacción –
Sin embargo, Obama formuló un alerta ante el fortalecimiento de lo que denominó el «burdo populismo, a veces de izquierda pero mucho más comúnmente desde la derecha», tanto en Estados Unidos como alrededor del mundo.
«Mientras estos problemas han sido descuidados, las visiones alternativas del mundo han estado abriéndose paso», dijo en mensaje a la Asamblea General de la ONU.
En una parte de su discurso aparentemente dirigida al candidato presidencial conservador Donald Trump, Omaba dijo que ese «populismo» muchas veces «refleja la insatisfacción entre demasiados de nuestros ciudadanos», pero apuntó que la salida no es la ruptura con la integración global.
Para Obama, «un país rodeado por un muro apenas estará encarcelándose a sí mismo», en una aparente referencia a la propuesta de Trump de construir un muro en la frontera con México, para impedir el ingreso de inmigrantes, y de vetar el ingreso de refugiados musulmanes.
En la opinión del mandatario estadounidense, «un mundo en que 1% de la humanidad controla tanta riqueza como el restante 99% nunca será estable».
Obama dijo comprender que «el foso entre ricos y pobres no es nueva», pero reconoció que existe «un sentimiento general de injusticia».
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