Las isapres Cruz Blanca y Consalud estarían aceptando no subir el precios de sus planes de salud para evitar el pago de las costas judiciales.
Esta estrategía la adoptaron frente el aumento de los recursos de protección a los que han sido sometidos y es conocida en el ámbito jurídico como «allanamiento». Durante el proceso, con esta técnica, las aseguradoras aceptan no adecuar el precio base del plan del afiliado que presentó el recurso y, de esta manera, la corte no prospera en el trámite, según explica La Tercera.
Este método judicial por parte de la isapres comenzó una vez que la Corte de Apelaciones desestimó el allanmiento, pero al ser revisado por la Corte Suprema, fue validada.
“De las 12 salas que hay en Santiago, hay 10 que han acogido igual los recursos de protección y dictado el pago de costas; sólo dos seguirían los argumentos de la Corte Suprema. Igualmente, las isapres están apelando en todas las causas, buscando que se falle del mismo modo que en el caso de Rancagua”, dijo Claudia Reyes, abogada de la firma Gana Salud a La Tercera.
Según un estudio de la consultora Altura Management, entre 2010 y 2015 las isapres han debido pagar casi $ 53 mil millones por concepto de costas judiciales, destaca la publicación.
Carlos Tagle, abogado socio «Me subieron el Plan», indicó que que la estrategia usada por las isapres en la justicia es ilegal, pues lo que plantea la ley de isapres no se puede hacer diferencia entre los cotizantes de un mismo plan.