Universidad Católica se nota cansada. La seguidilla de partidos pospandemia, entre Campeonato Nacional, Libertadores y Sudamericana, tiene a la UC sin ser la máquina que fue en su momento, pero la jerarquía de su plantel, con un Fernando Zampedri en estado de gracia, le permitió vencer con lo justo por 2-1 a Cobresal en San Carlos de Apoquindo y, con ello, quedar como exclusiva puntera del torneo, con tres unidades más que Unión Española.
Los “mineros” se pararon de igual a igual en el primer tiempo y eso desencadenó en un duelo de ida y vuelta. La velocidad de Juan Carlos Gaete fue un problema sin solución para la zaga de los «cruzados» y sólo la imprecisión en el finiquito tardó la apertura de la cuenta.
Hubo que esperar hasta los 40’, cuando Marcelo Cañete se mandó una exquisita jugada personal, habilitó a Franco Ragusa y este último clavó la pelota en el ángulo de Matías Dituro. Merecida ventaja para la visita al momento de irse al descanso.
Ariel Holan pateó el tablero tras el entretiempo y metió tres cambios. Tomás Asta-Buruaga, Marcelino Núñez y Diego Buonanotte fueron el revulsivo que esperaba el entrenador.
Sin embargo, los que marcaron la diferencia fueron Edson Puch y “San Pedri”. A los 56’, “Comando” se fabricó un claro penal y el delantero argentino fusiló para el 1-1 parcial.
A los 78’, el campeón de la Copa América Centenario volvió a demostrar su calidad. En un golpe de vista, observó que el atacante transandino estaba bien posicionado en el área, le envió un centro como con la mano y la cabeza del ariete hizo el resto.
La UC vuelve a la cima de la mano de su inspirado artillero, que llega a 13 tantos y tiene a su equipo en las alturas. Las llaves del gol -y del cielo- están en su poder.
