Alexis Sánchez vivió una de las jornadas más locas de su carrera en Italia. El delantero chileno fue titular por primera vez desde su llegada al Inter de Milán y respondió a las críticas, dando cuenta que aún está vigente en uno de los torneos más duros del mundo.
Ante Sampdoria, Sánchez anotó un gol, le quitaron otro y luego terminó expulsado por simular un penal, en una tarde en Génova que seguramente va a recordar por mucho tiempo.
En el primer gol de los lombardos, Alexis desvió el remate de Stefano Sensi y parecía que era su tanto de arranque en el Calcio, pero la Serie A finalmente le dio la cifra al volante italiano.
Pero dos minutos después Sánchez si anotó el gol. Tras un pase de Sensi, el chileno se metió solo dentro del área y con un toque sutil marcó el 2-0 parcial. La acción fue validada por el VAR y la jornada soñada estaba floreciendo. Sin embargo, todo se derrumbó en el segundo lapso, porque antes del descanso recibió una amarilla evitable por una infracción sobre un rival.
El activo delantero chileno, que se movió bien por todo el frente de ataque, era de los mejores de la cancha y justificaba la decisión de Antonio Conte de ponerlo como titular, pero el destino quiso otra cosa. El nacional fue a buscar un rebote y cayó dentro del área, el juez le mostró la segunda amarilla y por consiguiente se fue expulsado contra todo pronóstico.
Un día de locos para Alexis Sánchez, pero en el cual demostró que todavía tiene fuelle para brillar en el más alto nivel.
