La patada que le dio Gonzalo Jara al hincha que invadió la cancha del Maracaná e interrumpió el partido entre Chile y Uruguay se ha convertido en la gran polémica de las últimas horas de la Copa América de Brasil.
Según dio a conocer TVN, su nombre es Pablo Loyudice, un español radicado hace muchos años en Argentina y que al momento de ingresar al campo de juego se encontraba bajo el efecto de las drogas, «completamente alterado y sin lucidez», de acuerdo al informe de la causa judicial.
Tras ser detenido, Loyudice fue trasladado hasta el hospital penitenciario, pero ahí «todo el tiempo trató de herirse a sí mismo y a la policía», por lo que fue derivado al Hospital Penal Psiquiátrico hasta que bajara las revoluciones.
Después de quedar en libertad, el «espontáneo» hincha habría enviado un duro mensaje: «Los chilenos ya nos traicionaron una vez con las Malvinas, y me traicionaron ayer en la cancha. Así que chilenos, nacieron traidores y traidores morirán. Quiero que lo sepan».
De acuerdo a la señal televisiva, el fanático fue liberado por requerimiento del consulado español a la justicia de Brasil, aunque deberá firmar mensualmente mientras dure el proceso y tiene una prohibición para acercarse a los estadios.