Con la llegada de Harold Mayne-Nicholls a la dirigencia de Blanco y Negro, el dirigente completará «un paso» por cada grande del fútbol chileno, los mismo a los cuales culpó de su salida de la ANFP hace 9 años, lo que provocó el arribo de Sergio Jadue a la presidencia de la ANFP.
El ex presidente del fútbol chileno comenzó su carrera dirigencial en Universidad Católica durante los años 90, después de ser jefe de prensa de la Copa América 1991, jugada en el país. En los Cruzados fue gerente del fútbol entre 1991-1993 y entre 1996-2000, además de ser dirigente del club entre 2001-2005. Además, es sabido que también es hincha de la UC.
Luego de eso llegó a la testera del fútbol nacional entre 2007 y 2010 con el recordado período de Marcelo Bielsa y la clasificación al Mundial de Sudáfrica 2010 de la Roja, desde donde estuvo alejado hasta que reapareció como candidato para la dirigencia de la Universidad de Chile a fines del año pasado.
En Azul Azul, Carlos Heller lo sondeó como vicepresidente ejecutivo a principios del año 2019, de hecho Mayne-Nicholls presentó un proyecto deportivo para levantar a los universitarios que no vivían un buen momento. Sin embargo, esta iniciativa fue desechada por la concesionaria azul.
«Me avisaron que no va la vicepresidencia de la U. No me dieron razones. Tampoco las pedí. No niego que me motivaba la idea, por eso presenté un proyecto ambicioso. Agradezco a los seguidores e hinchas de la U por todo el apoyo», escribió en sus redes sociales.
Finalmente, el ex dirigente de la FIFA recaló en Colo Colo de la mano de Anibal Mosa y con la idea ejecutar ideas que emanen desde el directorio y que tengan un fuerte lazo con el club social, como la remodelación del estadio Monumental y mejores condiciones a los socios. Además, el periodista también asumirá un rol de vocería.
De esta forma, Mayne-Nicholls comienza un nuevo capitulo en uno de los grandes del fútbol chileno, el único que le faltaba, tratando de unir a un Blanco y Negro que se ha caracterizado por sus divisiones internas.