La historia del seleccionado de Croacia tiene mucha ligazón con la creación de la República de Croacia, tras la disolución de la antigua Yugoslavia a inicios de la década de los ’90. En 1992 se unieron como federación a la FIFA y a la UEFA, pero sin embargo, la tradición futbolística venía de mucho antes.
Según indican los registros, fue en 1940 el primer partido de una selección croata. Se realizó en Zagreb ante Suiza, con triunfo local por 4 goles a 0. En ese periodo, desde 1941 hasta 1945, incluso estuvieron afiliados a la FIFA, jugando 15 partidos amistosos oficiales hasta que Croacia fue anexado a Yugoslavia, desapareciendo su federación local. Antes de esta década e incluso después, hubo combinados locales, cuyos encuentros no son considerados por el ente rector del fútbol.
Entre medio, muchos croatas ilustres defendieron los colores de Yugoslavia y que después, defendieron la peculiar camiseta de su país, esa de los cuadrados rojos. Es cosa de recordar algunos nombres, como Zvonimir Boban, Robert Jarni, Robert Prosinecki, Davor Suker, el entrenador Mirko Jozic. Todos ellos, por ejemplo, fueron campeones en el Mundial Sub 20 realizado en Chile, en 1987, con la casaquilla yugoslava.
En el caso de Jarni, Prosinecki y Suker, siguieron defendieron a Yugoslavia en el Mundial de Italia ’90 y ocho años más tarde, lo hicieron en Francia 1998, representando a Croacia. A este grupo también se unió Boban, el capitán de esa recordada selección que finalizó tercera en tierras galas.
Primer paso europeo y en serio
Ya como país independiente, Croacia disputó sus primeras eliminatorias para la Eurocopa de 1996 de Inglaterra (vaya coincidencia). En el camino se dio el lujo de hasta vencer a Italia y clasificar primeros en su grupo, donde compartió con la Azzurri, Estonia, Lituania, Eslovenia y Ucrania. Las cuatro últimas, junto con los helvéticos, compartían el debut en instancias continentales como estados independientes y escisiones de disueltos países.
En la cita de Inglaterra, llegaron a cuartos de final, quedando eliminados ante el gigante Alemania. Previamente, salieron segundos del grupo D, tras Portugal y dejando eliminados a Dinamarca y Turquía.
Dos años más tarde, tras clasificar al Mundial de Francia, obtuvieron el resultado más importante en una cita planetaria hasta este miércoles 11 de junio de 2018. En ese entonces, salieron terceros, tras quedar eliminados en semifinales ante los anfitriones y obtener el premio de consuelo ante Holanda.
Sin embargo, el triunfo más recordado fue la goleada en cuartos de final ante Alemania por 3 a 0, jubilando a una generación teutona que lo ganó todo años antes y donde estaba Jurgen Klinsmann, Lothar Mattheus, Thomas Hassler, Oliver Bierhoff, entre otros.
Los goles anotados por Robert Jarni, Goran Vlaovic y Davor Suker, en el estadio Gerland de Lyon, quedaron registrados en la retina del mundo futbolero, enfatizando que la base croata era en gran parte, el sustento principal de las viejas glorias de Yugoslavia.
Pero, en el 2000 vino el primer fracaso: en la Eurocopa que se realizó en Holanda y Bélgica, los helvéticos no superaron la fase de clasificación y quedaron fuera de la cita continental.
El nuevo siglo
La oportunidad para lavar heridas estaba a la vuelta de la esquina: las eliminatorias al Mundial de Corea Japón 2002. Clasificaron de manera directa a la instancia y de forma invicta, superando a Bélgica, Escocia y más atrás, a Letonia y San Marino.
En el continente asiático ganaron un solo partido, ante Italia, y perdieron los otros dos con México y Ecuador, quedando eliminados en primera fase. ¿El entrenador de ese equipo? Un conocido nuestro, Mirko Jozic.
En la Euro 2004, organizada por Portugal, salieron segundos en las eliminatorias, tras Bulgaria. Y en la cita, otra vez finalizaron su participación en la fase de grupos, perdiendo con Inglaterra y empatando ante Suiza y Francia.
Tras estas últimas malas actuaciones, comenzó un trabajo desde las bases y así generar para años más tarde, una generación de recambio. Paralelamente, se avecinaba otro mundial: Alemania 2006. Y como era costumbre, las clasificatorias fueron un mero trámite: primeros del grupo 8 y junto a Suecia, se anotaron en la lista de los 32 equipos participantes.
En tierras germánicas, nuevamente la decepción: derrota ante Brasil y nuevamente dos empates, esta vez ante Japón y Australia, fue el corolario de una participación desastrosa.
Para finalizar la década, clasificaron primeros en el camino rumbo a la Eurocopa 2008 de Austria y Suiza y asimismo, salieron primeros en la primera fase del torneo, superando incluso a Alemania. Pero, el sueño se derrumbó en cuartos de final, donde cayeron a penales con Turquía.
La década terminó de forma horrible: finalizaron terceros en las clasificatorias a Sudáfrica 2010 y por primera vez, quedaron fuera de un mundial. Sin embargo, ya aparecían nombres como Ivan Rakitic y Mario Mandzukic como parte de la generación de recambio.
Nuevos nombres
Mirando el mundial por televisión y desde lejos, la federación tenía como primera meta, mejorar los resultados en la Eurocopa siguiente: la edición de 2012, en Polonia y Suiza. Como era la tónica, la clasificación fue relativamente fácil y sin problemas: segundos en el grupo H tras Grecia. Sin embargo, los resultados fueron esquivos y a pesar de que hubo mejoras en el nivel, quedaron otra vez fuera en primera fase. Un triunfo ante Irlanda, empate con Italia y derrota con España, los mandaron de vuelta.
Nombres como Luka Modric, Sime Vrsaljko, Domagoj Vida, Ivan Perisic, Marcelo Brozovic, además de Ivan Rakitic y Mario Mandzukic, comenzaban a ser constantes en las nóminas de Croacia.
Para Brasil 2014, las clasificatorias fueron un poco duras, debido al gran nivel de Bélgica, que le sacó 9 puntos de ventaja. Debieron resolver su paso en una repesca ante Islandia, siendo vencedores.
En el mundial sudamericano, completaron su tercera eliminación en primera fase. Dos derrotas ante Brasil y México, más una goleada a Camerún, sellaron una pobre participación.
Consolidación de una generación histórica
En Croacia estaba la sensación de que había buenos nombres, pero que en la selección no rendían lo mismo. Pero igualmente había fe en lo que venía. Para la clasificatorias a la Eurocopa de Francia 2016, clasificaron segundos en el grupo H.
En primera fase por fin pudieron pasar de ronda: vencieron a Turquía en su debut, igualaron con República Checa y ganaron a España. Pero, apareció el imparable Portugal de CR7, quienes los vencieron por la mínima en octavos de final, con un gol de Ricardo Quaresma en el minuto 117 de la prórroga.
Y para Rusia, nuevamente hubo muchas dudas. Croacia fue segundo en el grupo I, tras la sorprendente Islandia. De hecho, hace justo un año perdieron ante los vikingos en Reikiavik, generando muchas dudas rumbo a la capital moscovita. Los balcánicos incluso debieron clasificar otra vez en repesca, venciendo a Grecia, bajo el mando de Zlatko Dalic.
El resto ya se sabe. Clasificaron primeros y primeros en el grupo D, bailaron a Argentina, eliminaron a Dinamarca, Rusia y a los inventores del fútbol, Inglaterra. Croacia hace historia propia y ya superó a sus antecesores de Yugoslavia, cuyo máximo logro fue el cuarto lugar en el Mundial de Chile 1962, cayendo precisamente ante la Roja, con gol de Eladio Rojas. Pero eso, es otra historia.