El arquero titular de Túnez, Mouez Hassen, debe estar pasando por uno de los momentos más tristes de su carrera futbolística. Con sólo 23 años, el guardameta que milita en la Segunda División del fútbol francés estaba cumpliendo el sueño de debutar en un Mundial y lo estaba haciendo como la gran figura del encuentro gracias a sus grandes tapadas ante Inglaterra.
Sin embargo, las buenas duraron apenas 15 minutos y tuvo que reemplazado por una lesión en el hombro izquierdo, siendo Farouk Ben Mustapha el encargado de tomar su lugar. Así, el sueño de Hassen de defender al país donde nacieron sus padres, ya que él es francés y hasta el año pasado jugaba en las juveniles de los galos, se esfumó rápidamente.
Previo a la lesión que sufrió ante Inglaterra en Rusia 2018, el arquero que milita en el Chatearuox había defendido a Túnez en apenas tres ocasiones, todos partidos amistosos, y su debut por la selección africana fue en marzo de este año. Incluso, en uno de esos encuentros, ante Turquía, ya había hecho noticia tras ser acusado de simular una lesión en el codo para permitirle a sus compañeros, que recién habían terminado el ayuno por el Ramadán, ingerir agua y barras de cereal.
