La justicia de España se fue con todo en contra de los futbolistas. Este miércoles, el delantero del París Saint Germain Ángel Di María, ex jugador del Real Madrid, logró un acuerdo amistoso con la fiscalía española debido a un fraude fiscal de 1,3 millones de euros en concepto de derechos de imagen.
Según el documento judicial al que accedió AFP, la fiscalía aceptó que Di María pague 2,2 millones de euros a cambio de una pena de prisión de 16 meses, que previsiblemente no cumplirá al ser inferior al umbral de dos años y no tener él antecedentes penales.
El escrito de la fiscalía provincial de Madrid detalla que cuando el argentino fichó por el club merengue en junio de 2010, mantuvo una estructura societaria creada para gestionar sus derechos de imagen, a través de una sociedad panameña (Sunpex Corporation Inc) y otra irlandesa (Multisports & Image).
En 2012 y 2013 no declaró los ingresos derivados de esos derechos de imagen, lo que resultó en un perjuicio total para la Hacienda Pública española de casi 1,3 millones de euros, añade el documento.
En un primer momento, el jugador aceptó pagar en febrero de este año una deuda tributaria cifrada en 1,45 millones de euros. Ahora, en virtud del acuerdo amistoso, el jugador reconoce los dos delitos cometidos contra la Hacienda Pública en 2012 y 2013, y pagará por ellos una multa total de más de 779.000 euros.
El extremo, de 29 años, es cliente del agente portugués de jugadores Jorge Mendes, quien se encuentra en el ojo del huracán de una ofensiva de la justicia española contra el fraude fiscal en el fútbol. Otros dos célebres clientes suyos, el delantero del Real Madrid Cristiano Ronaldo y el técnico del Mánchester United José Mourinho tienen también problemas con la justicia española.
